La Tercera y la Regional 'regala' siete partidos para el disfrute este sábado. En la categoría nacional destaca el duelo que vivirán dos de los equipos invictos, Vianés y Alfaro, así como la visita del Haro al campo del Yagüe. En Regional, el líder Ciudad de Alfaro buscará continuar con su espectacular rendimiento frente al Cenicero.
Tercera
Villegas-Arnedo (La Ribera, 16.30): El Villegas regresa a La Ribera, un campo en el que se ha hecho fuerte gracias a dos victorias. Los encarnados son conscientes de que deben aprovechar sus virtudes como locales para tratar de sumar puntos y acercarse lo antes posible a su objetivo de la salvación. Intensidad, presión, juego directo, seguridad defensiva y confiar en sus opciones ofensivas son sus armas. Enfrente estará un Arnedo, invicto, que apuesta por dar un alto ritmo a los partidos y por buscar las bandas para romper a sus oponentes, entre otras cosas. Un aspecto a mejorar es su capacidad defensiva, que ha sufrido alguna grieta en determinados partidos. En este sentido, el conjunto que imponga su estilo tendrá el camino allanado para conseguir sus objetivos. Victoria visitante por calidad, aunque el Villegas está muy decidido en La Ribera y con fe todo es posible.
Vianés-Alfaro (Príncipe de Viana, 17.00): El líder visita el Príncipe de Viana con el pleno de victorias y con el liderato como credencial para imponer respeto e intimidar al rival. sin embargo, el Vianés, invicto, está demostrando que con trabajo, esfuerzo y orden en las tareas defensivas se pueden lograr cosas en ataque si hay calidad en la parte ofensiva, como es el caso de los navarros. Por eso, los de Iñaki Santibáñez, aunque parten como víctimas, seguro que plantean un partido incómodo para los blanquillos, áspero para que los riojabajeños no puedan desplegar su fútbol. Es la manera de evitar que el Alfaro campe a sus anchas en el Príncipe de Viana. Aun así, los hombres de Eduardo Arévalo están sabiendo sobreponerse a las adversidades (remontada en los minutos finales ante el River) y han demostrado solvencia en campos complicados como La Salera o San Bartolomé. El sentido común dice triunfo visitante, pero el Vianés ha ofrecido rendimiento más que suficiente como para pensar que otro resultado no es inviable.
Berceo-Calasancio (La Isla, 17.00): El Berceo, que encadena dos partidos sumando, recibe a un Calasancio crecido, invicto y que apuesta por la solidez defensiva para lograr puntos jornada tras jornada. Los de Víctor Ubis han encontrado el camino del gol, pero, a su vez, han evidenciado que es un equipo vulnerable si no mantiene la intensidad durante los 90'. Encontrar el equilibrio en ambas áreas es el objetivo. Los colegiales, se presupone, continuarán fieles a su estilo de no dejar espacios, de imposibilitar la creación del rival, de hacerse fuertes desde la defensa y aprovechar sus oportunidades a la contra o a balón parado. Quizá por eso, los errores pueden pagarse caros en La Isla. Empate, aunque el triunfo de ambos contendientes no sería algo descabellado.
Yagüe-Haro (El Salvador, 18.15): El Haro, tras ceder sus primeros puntos de la temporada frente al Calahorra, visita al colista. Los blanquinegros no pueden perder comba ante el ritmo impuesto por el Alfaro por lo que todo lo que no sea sumar de tres en tres ante rivales, en teoría, inferiores sería un paso atrás para sus aspiraciones. Para comprender que todos los partidos son exigentes, independientemente del adversario, los jarreros deben recordar el sufrido triunfo logrado en Pradejón. Pese a ello, los de Roberto Ochoa serán fieles a su estilo, aunque puede ser una buena oportunidad para ganar confianza en las tareas ofensivas. Enfrente estará un Yagüe muy necesitado que sólo ha podido sumar un punto de los 15 disputados. Los amarillos están obligados a puntuar, más allá de cuál sea el rival, si no quieren verse en el furgón de cola tan pronto. Los de Dani Terroba, además, afrontan el duelo con numerosas bajas, algunas por sanción y otras por lesión, lo que obligará a tirar del juvenil para completar la convocatoria. Victoria visitante, otro resultado sería un fiasco para el Haro, que tiene más que perder que ganar, lo contrario que el Yagüe.
Regional
Casalarreina-Bañuelos (El Soto, 16.00): Partido de urgencias. ¿Tan pronto? Si. El Casalarreina necesita un punto de inflexión para recuperar el terreno perdido en estas jornadas iniciales y debe imponer su ley en El Soto si quiere aspirar a algo. Por el momento, su rendimiento en como local es desigual, mientras que a domicilio no ha podido ofrecer su potencial. En similares términos se encuentra un Bañuelos, que no ha sumado aún a domicilio, y que comprueba que el retorno a Regional está siendo complicado. El equipo que esté más concentrado y no cometa errores ganará enteros para llevarse el encuentro. Victoria local.
Ciudad de Alfaro-Cenicero (La Molineta, 17.00): El líder invicto e imbatido recibe en La Molineta a un Cenicero herido tras su derrota de la pasada semana en Las Viñas. Los de José Luis Marcos querrán olvidar la imagen ofrecida hace unos días para recuperar sensaciones y demostrar que cuentan con una plantilla apta para aspirar a ser un candidato. Para ello deberán concentrarse en el trabajo defensivo, ya que enfrente estará un conjunto que apuesta por el ataque desde la posesión de la pelota. Cortocircuitar la fluidez en la circulación debe ser una de las bazas para hacer daño a los locales. Por lo demostrado hasta la fecha, la regularidad del Ciudad de Alfaro hace que sean favoritos. El partido se le puede hacer largo a los visitantes.
Oyonesa B-Calasancio B (Oion Arena, 19.30): Después de estas primeras cuatro jornadas, el Calasancio B se perfila como el equipo más vulnerable del grupo. Con muchos problemas a la hora de crear acciones de ataque y con muchas dudas en su parcela defensiva se ha ganado por méritos propios la posición de colista. Los colegiales tienen que mejorar sus prestaciones para ser más competitivos en la categoría, por de pronto no cometer tantos errores. Si algo está caracterizando a la Oyonesa B, por el contrario, es su orden, disciplina, capacidad para trabajar... su concentración y regularidad. Merced a ello se muestra como un equipo duro de batir que siempre tiene sus opciones ante la meta rival. El exceso de confianza de los blanquiazules puede ser su perdición, aunque no deberían tener problemas para ganar.
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