domingo, 23 de diciembre de 2012

Más intensidad que fútbol

Había tres puntos muy jugosos, pero al final, por cosas del fútbol, uno se quedó por el camino. El empate entre Sociedad Deportiva Logroñés y Unión Deportiva Logroñés sirve más a los locales que a los visitantes, sin embargo, la sensación de los blanquirrojos debe ser de haberse dejado dos puntos en su constante lucha por eludir el descenso (acaban 2012 en el puesto de promoción). Por su parte, los ayer azules tienen que dar gracias por no perder el partido. Merced a las tablas se pueden ilusionar con su objetivo de meterse en el 'play off' de ascenso (a 5 puntos), pero tienen que cambiar algunas cosas, sobre todo, en materia ofensiva para que los hombres de Pepe Calvo lleguen a su meta clasificatoria.

Tras una valoración del botín obtenido tras el derbi riojano, merece la pena echar un vistazo, como ya apunté hace unos días alejado del corazón, para tratar de desmenuzar los 90 minutos largos. Parto de la base que ambos entrenadores deseaban lo mejor para su colectivo, pero considero, y lo argumentaré, que los dos se equivocaron. Pepe Calvo, según se pudo observar durante el encuentro, erró de salida. Moustaphá es un jugador generoso en la brega, luchador incansable, fajador... pero no es un virtuoso con el balón, no puede ser el hombre para realizar cambios de orientación de 40 metros, como sucedió, no puede ser el jugador que lance paredes con Sergio Rodríguez... no es su función. El técnico leonés recitificó en el descanso y puso en el campo a Iturralde, un futbolista capacitado para conectar la defensa con el ataque. Pero no fue la única laguna del preparador de la UDL. Pase que Juanjo, ante la ausencia por sanción de Mario Barco, sea el único '9' del equipo, pero su estado físico no es el más adecuado. Tras más de mes y medio ausente por lesión, el choque de ayer le vino grande. Sin chispa, sin frescura, sin ritmo competitivo favoreció los intereses de la defensa local. Por voluntad no se le puede negar nada al ariete, pero no era su día.  

Alejandro, como enganche y llegador en segunda línea, fue de más a menos. Empezó con brío, pero apenas participó en el juego de su equipo. Tal y como juega la UDL la función del asturiano quizá debía haber pasado por moverse entre líneas, apoyar a los medios centros en ataque, abrir huecos para Juanjo, dejarse caer a bandas en busca de dos contra uno con los laterales... Es cierto que alguna vez lo hizo, pero de forma intermitente. Su expulsión final es fruto de la impotencia. Probablemente, Sergio Rodríguez en esa labor hubiera hecho más daño a una SDL sólida en la parte de atrás. En este sentido, Rubén García, jugador con criterio y sentido del juego colectivo hubiera sido un buen apoyo a Iturralde en la creación, dejando a Sergio Rodríguez con más libertad de movimientos entre líneas. Porque el riojano, más allá del error cometido en el gol de la SDL, estaba muy atrás, en una zona en la que sus pases son más previsibles y hacen menos daño al rival.

Pero también hay que mencionar los aspectos positivos de Pepe Calvo. Tras el cambio obligado de Ledo, apuntó con certeza el punto débil de la SDL, su costado izquierdo. De hecho, los últimos veinte minutos Quero y Ormazábal fueron una auténtica pesadilla para Miguel, improvisado lateral izquierdo. Incluso rectificar en el descanso para poner a Iturralde por Moustaphá es una buena visión de lo que necesita el equipo, aunque fuera con 45 minutos de retraso. No me quiero olvidar de un detalle táctico. La SDL, ya contra el Izarra, ante la primera falta lateral apostó por buscar el fuera de juego del rival. Ayer hizo lo mismo. La labor, en este caso, del preparador azulón pasaba por tener prevista esta situación y buscar una solución si eso acontecía. No se vio. 

Pasemos a Agustín Abadía. Como ya apunté, en la previa, la tónica del choque iba a ser similar a la del duelo en Copa del Rey. La única salvedad fue que la SDL no se presentó una defensa tan adelantada como ya hiciera en el primer tiempo en el torneo del ko. Sin embargo, el espejo en el que se miró fue en la segunda parte de esa competición. Líneas juntas, obligando al rival a jugar con balones largos de sus centrales, desesperando a sus hombres del centro del campo, no dejando un resquicio a los delanteros rivales... En este sentido, la propuesta fue de diez. La ausencia de un hombre como Pitu se podía acusar, pero Candelas, infatigable y solidario en el trabajo, y Miguel se multiplicaron para tapar los huecos. Además, Olavarrieta ayudó siempre, presionando, incomodando, robando... Del Puente y Toledo no temían en abandonar las bandas para ayudar en el centro para tapar la circulación de la UDL. Perfecto. Incluso resultó un acierto la inclusión en el once de un hombre en un espectacular momento de forma y de confianza, como Ledo, en vez de Metola, que esta semana había arrastrado molestias musculares. 

El único pero que hay que ponerle al técnico de Binéfar vino con la lesión de Ledo. Insisto, su intención fue acertar y había que tomar una decisión rápida. Miguel, sólido en la media, pasó al lateral izquierdo dejando un centro del campo con Candelas y Fran Sota. Problemas en ambas parcelas. El capitán blanquirrojo acusó el cambio de demarcación. Quero parecía imposible de parar y el riojano no podía evitar que la UDL llegara con asiduidad por su costado. De hecho, el empate vino por este lugar. A posteriori, una opción podía haber sido pasar a Del Puente al lateral derecho y que Gerardo hubiera estado en el carril izquierdo. El calagurritano ha desempeñado esa labor de forma aseada, mientras que Gerardo cumple donde lo pongas. No se sabe qué hubiera pasado. De todas formas, Abadía tenía que mover sus piezas. Pensó que era la mejor opción, aunque por el desarrollo de los últimos minutos se comprobó que no fue la mejor decisión. 

¿El partido? Mi titular sería, 'Ledo, decisivo'. Porque marcó el gol de su equipo, porque evitó el empate sacando un balón en la línea y porque su lesión fue el punto de inflexión para que la UDL encontrara un resquicio por el que llegar a Gonzalo. El central riojano está de dulce. Con confianza, serio, sobrio, sin estridencias, cumplidor, consciente de sus limitaciones... es una muestra del espíritu de esta SDL. Con decisión y valentía recorrió los cien metros del campo para pasar de defender un córner a marcar un gol en unos segundos. Sergio Rodríguez dudó en despejar a la primera, optó por poner el cuerpo y tratar de controlar... Del Puente le robó la cartera y se echó a la carrera. El centrocampista de la UDL pudo, y debió, hacerle falta pare frenar la contra. No lo hizo y el extremo se escapó en velocidad, asistió al carril centro para que Ledo, al pimer toque y ante la salida de Castilla, marcara. Gol de raza y de ejemplo de lo que es la SDL. Velocidad, transiciones rápidas, centro y remate. De libro.

El tanto local dio más convicción a los blanquirrojos de que el partido estaba como ellos querían. Se les veía cómodos. La UDL jugaba con lentitud, sin profundidad, las circulaciones no eran veloces, apenas aprovechaban las bandas (es incomprensible que Iñaki y Víctor tengan tan poca participación en el ataque azul), salvo dos centros de Iñaki y dos remates de Quero (uno se fue arriba y otro se marchó a córner tras impactar en Moya). Alejandro y Juanjo parecía que no jugaban porque no entraban en juego. Gil y Raúl Torres bastante tenían que para las embestidas de Jorge Herreros y de Olavarrieta como para encima tener que ser los 'creadores' del equipo con balones directos que facilitaban la labor de la defensa local. La UDL estaba tocada, mientras que la SDL salía con velocidad y criterio a la contra. La única oportunidad visitante vino en un envío largo a Quero, Gonzalo salía tarde y el asturiano superaba al portero... pero Ledo llegaba a tiempo para despejar sobre la línea.

Tras el descanso, la tónica fue muy similar. La UDL, eso sí, parecía que estaba más dispuesta a atacar. La pelota era de su dominio, pero las ocasiones favorecían a los de Abadía. Candelas, con una buena volea, probaba a Castilla y Jorge Herreros tuvo la sentencia en una contra. Ahí pudo estar el partido, pero el delantero no está, últimamente atinado cara a portería. Cuestión de rachas. Lo hizo todo bien, menos el tiro final, a romper, al medio, justo al cuerpo del portero visitante. Los azulones comprobaron que el choque se les escapaba. Necesitaban algo de confianza para batir a Gonzalo. Trataron de meter miedo en el cuerpo a los locales con varios saques de esquina y alguna que otra falta, pero sin mayor consecuencia. Pero un mal endémico de la SDL, las lesiones, le volvieron a pasar factura. 

Con Omar en el banquillo, tuvo que ser sustituido en los primeros minutos, Ledo también tenía que retirarse (Candelas, por un golpe, cojeaba, aunque aguantó, mientras que Moya también parecía sufrir problemas musculares). Fue el momento aprovechado por la UDL para reaccionar. Quero se multiplicó por su perfil diestro, donde superó a un Miguel, que bastante hacía. Iturralde inició la jugada del empate, con una apertura a la banda, y la culminó con un remate de cabeza, en el primer palo, que sorprendió a Gonzalo. Empate a uno. La sensación era que estaba más cerca el 1-2 que el 2-1. Pero las interrupciones jugaron en favor de los locales. El choque se trabó en exceso. Los visitantes querían, pero no llegaban, mientras que la SDL parecía que daba por bueno el empate, aunque no renunciaba a salir en alguna contra. Que el derbi acabar con las expulsiones de Alejandro, por doble amarilla, y de Pepe Calvo fue el final de un derbi riojano que sirvió para despedir el fútbol en Las Gaunas en 2012.

sábado, 22 de diciembre de 2012

Previas 22 diciembre

Último fin de semana del año de fútbol en los campos riojanos. Con un duelo en lo alto en Segunda B (ver la entrada de ayer), con la Regional esperando su momento (descansa hasta el segundo fin de semana de enero), la Tercera despide 2012 con muchos frentes abiertos. Por de pronto, este sábado se disputarán hasta nueve partidos, dejando para mañana el apasionante Náxara-Haro. El Alfaro intentará meter presión a los jarreros durmiendo como líder si vence a La Calzada. Oyonesa-Arnedo y Vianés-Agoncillo serán dos intensos partidos entre equipos que quieren estar entre los cuatro mejores. Por abajo, el Pradejón recibe al Calahorra, el Aldeano hace lo propio con el Varea, mientras que el Rapid se mide al Villegas en Murillo. El Calasancio juega en La Estrella contra el San Marcial, mientras que el Berceo se enfrenta en La Isla al River Ebro. Asimismo, el Yagüe visita el campo de Anguiano.


Berceo-River Ebro (La Isla, 15.30): El River Ebro encadena siete derrotas a domicilio. El gran lunar de los rojiblancos. Su comodidad en la tabla viene dado por sus buenos resultados en casa (seis victorias, cinco de ellas seguidas). Parece que el rendimiento de los rinconeros baja como visitantes. Sin embargo, la forma de jugar es muy similar. El Berceo, por su parte, llega al duelo con confianza tras batir con autoridad a un rival directo (Yagüe) en la lucha por la salvación. No en vano, ahora cuentan con un margen de 7 puntos interesante para sus aspiraciones. Pese a ello, los verdes no pueden relajarse ni bajar un ápice su intensidad para seguir sumando puntos en Tercera y consolidarse en la clasificación. Empate.

Aldeano-Varea (San Bartolomé, 15.30): Diez derrotas consecutivas contemplan a un Aldeano que empezó sólido y que ha ido diluyéndose con el paso de las semanas. Pese a su mala racha, tiene la salvación a 2 puntos, por lo que sus números pueden olvidarse de lograr una victoria. Enfrente estará un Varea que si hace dos jornadas rompió su maleficio, con Emilio Remírez, a domicilio hace unos días perdió en casa ante un rival directo en su pelea por un lugar en la fase de ascenso. Los arlequinados evidenciaron que pese a genera ocasiones de gol, les falta afinar la puntería, además de mostrarse más contundentes en la parcela defensiva. Los visitantes tienen una oportunidad de reencontrarse con su juego ante un rival tocado, que intentará apelar a su orgullo para dar la sorpresa. Triunfo visitante.

Anguiano-Yagüe (Isla, 15.45): El Anguiano suma una derrota en las últimas siete jornadas. Un indicativo de que ha olvidad su mal arranque liguero, que ha recuperado parte de sus prestaciones y que va en línea ascendente. Por su parte, el Yagüe lleva cinco partidos sin ganar y no acaba de escaparse de la parte peligrosa. Lo intenta, pero no muestra capacidad para ello, además vienen de perder ante un rival directo (Berceo) que demostró más ganas que los amarillos por lograr el triunfo. Por dinámicas de ambos equipos, el sentido común apela a una victoria local, aunque los amarillos han demostrado ante rivales superiores que pueden dar la talla.

Rapid-Villegas (El Rozo, 15.45): El Rapid buscará 3 puntos de oro que le puedan permitir, en función de otros resultados, acabar el año fuera del descenso. Los de Borja Lerma tienen que exprimirse en cada partido para sumar. Lo saben, lo asumen y tratan de dar el do de pecho en cada encuentro. Enfrente estará un Villegas que, de lograr la victoria, cogerá bastante tranquilidad en la tabla de cara a evitar el descenso, puesto que podría dejar a 8 puntos a los murillenses. Sería una forma formidable de que los encarnados concluyan 2012 con buenas sensaciones. Será un choque intenso, con mucha segunda jugada y con opciones de ambos cuando monten los contragolpes. El acierto en ataque puede ser decisivo para el devenir del marcador. Empate.

Pradejón-Calahorra (Municipal, 16.00): El Pradejón todavía no ha ganado como local. Estos problemas para sumar ante su afición puede ser una de las causas por las que los verdiblancos vayan últimos en la tabla. Reciben a un Calahorra inmerso en otra lucha, en la de los puestos de 'play off'. Con metas diferentes, los calagurritanos intentarán consolidar su posición, mientras que los locales quieren demostrar que quieren quedarse en Tercera. La siete jornadas sin ganar (1 de 21 puntos posibles) son una losa importante, pero también un acicate para salir de sus malos resultados y de su posición, Victoria rojilla.

Alfaro-La Calzada (La Molineta, 16.00): El Alfaro tratará de ponerse como líder en solitario a expensas de lo que haga el domingo el Haro. Recibe a una Calzada que atraviesa por una mala racha de resultados, cinco derrotas seguidas, y que necesita sumar puntos en busca de la tranquilidad. Los blanquillos, por su parte, pasan por una buena dinámica y saben que si quieren ser líderes tienen que imponer su calidad ante rivales, en teoría inferiores. Pensar en una goleada puede ser el error de los locales, puesto que los visitantes han demostrado estar capacitados para aguantar. Su principal problema pasa por desinflarse en las segundas partes. Mantener la concentración y la intensidad los 90' es el primer paso. En los riojabajeños será baja por sanción el 'pichichi' del grupo Omar. Victoria local.

Calasancio-San Marcial (La Estrella, 16.15): El Calasancio está a 3 puntos de la zona de 'play off'. Impensable hace unos meses. Pero el trabajo, el hacer las cosas con humildad y una pizca de fortuna han propiciado que los colegiales puedan acabar el año entre los elegidos. El mérito hay que dárselo a una plantilla comprometida con la causa, disciplinada, consecuente con lo que es y honrada en el sacrificio. El orden defensivo como punto de partida para ganar los partidos. Las ocasiones ya vendrán, siempre hay opciones. Recibe a un San Marcial que hace una semana rompió su inercia negativa con una victoria ante un rival directo. Su pelea es escapar de la zona peligrosa y sumar, en cualquier campo, es su prioridad. Empate en La Estrella, aunque los amarillos buscarán el triunfo, sin volverse locos, que les confirme entre los mejores.

Oyonesa-Arnedo (Oion Arena, 16.30): Dos derrotas seguidas, ante rivales directos (Náxara y Vianés), han dejado al Arnedo a la expectativa y a 5 puntos del cuarto clasifinado. Ahora es como si estuvieran obligados a ganar en cualquier campo si quieren continuar con opciones. Curiosamente se miden a una Oyonesa que suma 11 partidos invicto. Una racha que le ha aupado a ser cuarto en la tabla. Los alaveses han basado su buen momento en la solidez defensiva. El debe puede ser la parcela ofensiva, ya que les está costando marcar goles. Sin duda es uno de los puntos negros de los blanquiazules. Eso les está llevando a tener que sufrir en cada partido para ganar (sirva el ejemplo del último encuentro ante el Villegas, con gol en el tiempo de descuento). Partido interesante, con dos conjuntos que le dan mucho ritmo al juego. Empate.

Vianés-Agoncillo (Príncipe de Viana, 16.30): Con dos triunfos seguidos el Vianés reclama su sitio en la zona noble. Ahora queda a dos puntos del cuarto puesto y recibe a un rival directo en la lucha por la fase de ascenso. Los navarros parten del orden para ir creciendo en la parcela ofensiva y jugar en función del resultado. Una nueva victoria les daría una confianza ciega en sus posibilidades. Enfente estará un Agoncillo que rompió su idilio con las victoria ante el Náxara. Un 0-3 que debe encorajinar a los avioneros para recuperar su mejor versión. Un choque importante para ambos, ya que una derrota mermaría las opciones de cara al 'play off', aunque aún resta mucha liga. Se impondrá el miedo a perder. Habrá intensidad y los errores primarán sobre los aciertos. Empate.

Domingo 23 diciembre

Náxara-Haro (La Salera, 16.30): El Náxara suma diez jornadas sin perder, incluyendo cinco victorias seguidas. Su gran racha le ha permitido pasar de la parte baja de la tabla a ser un claro candidato a la fase de ascenso, un objetivo que tiene a 2 puntos. Eso sí, para rematar la faena tiene que echar el resto tanto en la última jornada del año como en la inicial de 2013, ya que Haro y Varea son sus rivales. Por de pronto, recibe a un Haro que estará obligado a ganar para mantenerse en lo más alto de la tabla si el Alfaro hace los deberes ante La Calzada. Será un partido emocionante, intenso, con dos equipos que buscarán el triunfo en aras de acercarse a sus metas. Los blanquiazules tratarán de explotar su buen momento, mientras que los blanquinegros intentarán adaptarse a La Salera y explotar sus virtudes. Las acciones a balón parado pueden resultar claves en ambos sentidos.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Tres jugosos puntos

"El fútbol se ve con el corazón antes que con los ojos". Jorge Valdano lo adelantó en mayo de este año en la inauguración del VII Seminario de la Fundéu BBVA y la Fundación San Millán de la Cogolla. Jugador, entrenador, director deportivo... persona... gustará o no, pero este argentino de palabras retóricas y buen gusto por la oratoria acostumbra a encandilar. Es un arte. Sin quererlo, atisbó, hace unos meses, la sensación de los que asistan a Las Gaunas (sábado 22 de diciembre, 20.30 horas) al derbi entre Sociedad Deportiva Logroñés y Unión Deportiva Logroñés. Por suerte o por desgracia ha querido que sea justo un día después del anunciado fin del mundo (eso daría para un gran debate). Unos privilegiados, los que entren al campo, podrán verlo en directo. Lo más seguro es que el corazón guíe a los aficionados, que cada uno encuentre cosas que no hallaría si su equipo fuera el contrario. Por eso, contradiciendo a Valdano y apostando por la neutralidad haré algo que siempre me ha caracterizado, la imparcialidad. Una cuestión que gustará o no, pero que es la vía elegida. No soy aficionado. No tengo unos colores. Ninguno de los dos clubes me deben nada, ni yo a ellos. Mi vocación de periodista, cada vez lo ponen más difícil para que siga siendo una realidad, y mis conocimientos (o desconocimientos) futbolísticos me llevan a escribir de esta manera porque sí, porque me gusta. Al menos aquí no me pueden coartar. De momento. 


En Copa del Rey la victoria fue para la SDL, que también ejerció de local. LA RIOJA
Hablar de situaciones ideales no lleva a ninguna parte. Lo que interesa es la realidad. ¿Cuál es? Que dos equipos de Logroño, que militan en Segunda división B, miden sus fuerzas. Ambos tienen un objetivo para el final de temporada y ambos, como es lógico, buscan la victoria. No hay que olvidar que son tres puntos, que no es una eliminatoria a vida o muerte en la que el ganador sale a hombros y el perdedor desaparece del mapa. No. Cierto que el aspecto moral afecta y que el vencedor podrá sacar pecho durante unos días, vivirá unas Navidades más tranquilas con su parroquia... y poco más porque en dos semanas la competición regresa para disputar la última jornada de la primera vuelta. ¡Media liga todavía! Por lo tanto, mencionar o cuestionar que este choque es vital es animar al sensacionalismo, a la tensión y al nerviosismo. Tan importante es este duelo para la SDL como lo fue el de hace unos días contra el Izarra y tan importante es para la UDL como lo fue el celebrado en Tafalla ante la Peña Sport. Eso no quita para que haya una sensación, entre los aficionados y entre los propios jugadores, de que no es un partido más, que siempre hay algo en juego: demostrar quién es mejor, qué camino es el correcto, qué proyecto ofrece más consistencia. Pero hablo de sensaciones, no de lo que es en verdad. Aunque no se quiera, es inevitable, que unos quieran dar en el morro a sus vecinos. Ley de vida. Tres puntos. Ni más ni menos. ¿Jugosos? Evidentemente, y mucho. Pero sólo eso. Extraer conclusiones, por la victoria o la derrota, de otras cuestiones sólo lleva a debates poco sólidos, reaccionarios y con pocos argumentos si se fundamentan por la conquista o no de los puntos.

La UDL es 7º con 25 puntos, a 4 de los puestos de la fase de ascenso. Ese es su motor. Acercarse, una jornada más, a la zona de 'play off'. Le tiene que dar igual el contrincante. Su racha, cuatro jornadas sin perder, debe animarle para lograrlo. El problema puede residir en qué versión blanquirroja va a ver la grada: ¿la entrega ante el Eibar cuando el equipo se quedó en inferioridad? ¿El del primer tiempo ante Osasuna B? ¿Acaso el de la segunda mitad contra el filial navarro? ¿la solidez defensiva y oportunismo frente a la Peña Sport? Pepe Calvo sabe que la regulóaridad conduce al éxito. O al menos puede llevar a él. Y en eso se encuentra el técnico leonés. Asume que una de las claves para estar lo más arriba posible en la tabla pasa por la sobriedad en su área. Por el momento, salvo lunares puntuales poco se le puede pedir a este respecto, ya que es de los menos goleados del grupo. Que sea uno de sus puntos fuertes le puede pesar para no ser más valientes. Porque si el conjunto riojano tiene una laguna, un aspecto que debe mejorar, es el ataque.

Los partidos se ganan marcando un gol más que el rival. De perogrullo. Pero no hay que olvidarlo. Y lo que ofrece la UDL es que, a veces, parece rondarle cierto conformismo. Ojo, es lo que transmite el bloque. Eso no quiere decir que los jugadores no quieran atacar, estén reservones en esas tareas o que se les prohiba determinadas formas de actuar en el campo. Es evidente que Sergio Rodríguez es básico para entender el ataque. El riojano puede imprimir velocidad al juego, puede asistir en los últimos metros, puede abrir hacia los extremos, es una opción de llegada en segunda línea... Su participación es nuclear. Si se alía con las bandas, Quero, Barrón o Iñaki su equipo lo agradece. Si combina con el delantero: Mario Barco, Juanjo o Alejandro las prestaciones del equipo aumentan. Si Rubén García, por detrás, le ayuda en la elaboración la UDL lo agradece porque le favorece a no desgastarse en defensa mientras la pelota siga estando en sus pies. Otra cosa es que a los blanquirrojos (que jugarán de azul) les cuesta dar profundidad. Ahí el rival también juega.


Las acciones a balón parado puede ser decisivas en el devenir del partido. LA RIOJA

La SDL es 15º con 19 puntos, uno más que el del puesto de promoción. Poco margen. Cada punto le cuesta sudor, sangre y lágrimas a los de Agustín Abadía. Por no hablar de las sanciones y lesiones que han metido a los blanquirrojos en una dinámica complicada de la que escapar. Por suerte para el técnico de Binéfar, después de varios partidos, por fin podrá dar contar con dieciséis jugadores aptos. Toda una proeza, la verdad. El triunfo ante el Izarra le ha dado mucha vida. Sumaba siete jornadas sin ganar (2 de 21 puntos posibles) y veía como sus rivales directos se le acercaban en la tabla. Después de un comienzo liguero por encima de sus posibilidades llegó un bache de resultados y de juego preocupante. Sin duda el aspecto defensivo ha llevado a Abadía por la calle de la amargura. Ser el equipo que más goles recibe (30) del grupo, junto a Osasuna B, es una losa. El problema es que además concede muchas ocasiones de gol. Se puede pensar que el mal hay que encontrarlo en la zaga, pero en el fútbol actual el primer defensor es el delantero y el primer atacante es el portero.

El entramado defensivo de la SDL no es tan sólido, tan efectivo y tan brillante como lo era en septiembre. ¿Qué ha cambiado? Tantas variaciones en el once, la inmensa mayoría obligadas por las lesiones y sanciones, han cortado la proyección de un equipo que se caracterizó, en los albores de la temporada, por presionar cómo y dónde quería. Los oponentes caían, una y otra vez, en la tela de araña que tejían los blanquirrojos. El mejor ejemplo se pudo ver en el derbi disputado en la Copa del Rey. Defensa adelantada, presión constante en la medular... y los jugadores de la UDL aturdidos, sin ideas, preguntándose cómo atacar. Recuperar esa vitalidad, esa fe ciega en estar convencidos en lo que hacen tiene que ser el primer paso para que la SDL no conceda tantas oportunidades. ¿Qué decir del ataque? Si el equipo tiene la pelota, juega en posicional y el rival le espera, el cuadro de Abadía pierde opciones en tareas ofensivas. Los blanquirrojos están más cómodos si roban e imprimen velocidad y verticalidad al juego. Montar transiciones rápidas es una de sus especialidades, sólo hay que ojear los dos últimos goles frente al Izarra: pocos toques, llegada por banda, centro y remate.

Probablemente, la tónica del derbi sea similar a lo que ambos conjuntos ofrecieron en la eliminatoria de Copa del Rey: la UDL con el balón y la SDL esperando su momento. Los de Pepe Calvo circulando con lentitud y siendo superado en intensidad por su rival (sobre todo a balón parado), mientras que los de Agustín Abadía estaban muy sueltos, eran solidarios en el esfuerzo y fueron efectivos en ataque. Las acciones de estrategia pueden ser, como lo vienen siendo hasta la fecha, fundamentales. La SDL ha sufrido en estas jugadas defensivamente, mientras que la UDL viene de ganar gracias a una de ellas en ataque. Activación, convicción, concentración y asumir funciones son aspectos capitales para sacar el máximo rendimiento. ¿Resultado? Que gane el que lo merezca, el que sepa aprovechar sus ocasiones, el que menos errores cometa... en definitiva, que gane el mejor. Eso sí, el domingo trataré de contar el derbi pero sin hacer caso a Jorge Valdano, es decir, que veré el fútbol con los ojos y no con el corazón.

P.D.: Ambos equipos afrontan el partido con bajas importantes. La UDL echará de menos a Mario Barco, más allá de por sus goles, que también, por la movilidad, por el trabajo y por ser un incordio para los defensores. Será la oportunidad para Alejandro o Juanjo. Apuesto por el asturiano que puede ser más escurridizo y rápido que los zagueros de la SDL. Asimismo, Jano, en el centro de la defensa, es un pilar básico para Pepe Calvo. Su jerarquía, orden y mando se notan en el campo. Por la SDL, aunque ya va siendo una tónica, la ausencia de Pitu se acusa en exceso. Un jugador de sus características hace mejor al equipo, algo que se nota cuando no está presente. Abadía puede sorprender, en este sentido, variando su dibujo (siempre tiene alternativas) o encomendando ese equilibrio defensa-ataque a otro futbolista.