El Ciudad de Alfaro sigue a lo suyo. Quinta victoria consecutiva que le confirma como el gran favorito de la categoría, con permiso del EDF Logroño, que junto a los riojabajeños son los únicos invictos. Sus 16 goles a favor (más de 3 por duelo) y su único tanto recibido demuestran que es un equipo con mucho desborde y remate, además de ser un bloque difícil de superar. Quizá el éxito haya que encontrarlo en la aparente facilidad que tiene para dominar los partidos. El balón es su aliado, las bandas son sus puntos fuertes y la velocidad de juego en los metros finales son determinantes para romper los choques. Su última víctima fue el Cenicero. Los de José Luis Marcos llevan dos partidos para olvidar, derrota contra el Alberite en Las Viñas (0-3) y goleada encajada en La Molineta (4-1). Recuperar la dinámica exhibida en las primera jornadas debe ser la base para recuperar terreno en la clasificación y, por lo menos, postularse como un serio aspirante, aunque la competencia, como era de esperar, es máxima. Los locales, cuanto menos te los esperas, martillean el área rival. Las dimensiones del campo alfareño favorece sus intereses. Ahora la clave están en saber si habrá algún club capaz de impedir la marcha triunfal del Ciudad de Alfaro.
Si hay alguien que puede lograrlo, por resultados, es el EDF Logroño. Eso sí, tendrá que mejorar sus prestaciones. El pasado fin de semana sufrieron más de la cuenta para sumar tres puntos a su casillero. De hecho, la victoria llegó en el 93'. Lo que les faltó en la primera jornada, cuando el Tedeón les empató de penalti en el descuento, vino en el Príncipe de Viana. El Vianés B, aguerrido, evidenció que puede ser un rival peligroso, capaz de hacer frente a cualquiera. Para ello tiene que estar convencido. Su inconsistencia mental, cuando las cosas van mal aumenta su desesperación y lo acusa en el campo, no se notó y el que lo pagó fue el conjunto de David Juaneda. Los visitantes, más allá del juego y de los marcadores, están sabiendo sufrir sus resultados. Hasta la fecha han tenido que bregar en cada duelo y eso les hace sumamente competitivos. En los enfrentamientos ante rivales directos se verán sus posibilidades para continuar entre los mejores.
A la espera de algún fallo se encuentra el San Lorenzo, que parece desinflarse tras un punto de los últimos seis. La oportunidad de resarcirse de la derrota ante el líder no fue como los ezcarayenses hubieran deseado. Su duelo ante un aguerrido y casi siempre compacto Náxara B mostró las carencias y virtudes de ambos conjuntos. Un encuentro en el que cualquiera pudo ganar... y a la vez perder. La falta de puntería y el acierto de los porteros propició que las tablas fuera un resultado agridulce para los dos contendientes. Ocasión perdida para los visitantes para afianzarse en la parte alta y que comprueba que el debutante Balsamaiso le iguala a puntos en la clasificación.
Precisamente los de Diego Estecha tuvieron arrestos para remontar en el Sáenz Andollo, un campo maldito esta liga para los locales, puesto que el Alberite encadenó su tercera derrota como anfitrión. Una vez más el segundo tiempo, como ya le pasara ante el San Lorenzo, se les hizo excesivamente largo. En esta ocasión, la expulsión del portero Luciano, que provocó el debutante del juvenil arlequinado Iker, fue determinante para el cambio de rumbo en el encuentro. Ocasión que aprovecharon los logroñeses para voltear un marcador impensable, por lo visto en el campo, durante los primeros 45 minutos. Una victoria que coloca al Balsamaiso, que está sabiendo sufrir para lograr sus resultados, pero que sigue sumando, que es lo que al fin y al cabo cuenta.
La Oyonesa B, por su parte, desperdició una buena ocasión para crecer en la tabla. La visita del colista Calasancio B se presentaba como una oportunidad para sumar tres puntos con el mínimo esfuerzo. Sin embargo, los colegiales, muy aplicados en defensa tras los últimos descalabros, exigieron a los alaveses, que no tuvieron su día. Los locales, con poca claridad de ideas, evidenciaron que les cuesta tener que llevar el peso de los partidos, ya que se sienten más cómodos esperando y buscando el contragolpe. Aun así, Arkaitz tuvo un par de ocasiones para desequilibrar la contienda. Los amarillos, por su parte, fueron ganando en confianza a medida que transcurrían los minutos e hicieron todo lo posible por sumar su primer punto de la temporada.
El Tedeón quiere asomar la cabeza. Lo hace con victorias apretadas, por la mínima, y gracias a, por el momento, su único goleador de la temporada Jorge Marín. Los de Navarrete aún deben cuadrar algunas cosas para ofrecer el pleno rendimiento, pero sumar de tres en tres ante rivales ásperos como el Autol ayuda. Y eso que los rojiblancos hicieron todo lo humanamente posible por no caer derrotados en el San Miguel. No en vano, los visitantes salieron con muchas ganas, tratando de imponerse en la medular y acercándose a la meta rival. Una falta ejecutada por el mencionado Jorge Marín, resultó letal para las aspiraciones de ambos equipos. El Autol lo siguió intentando, pero el Tedeón se aferró a la victoria. El duelo se convirtió, por momentos, en un correcalles que a punto estuvo de perjudicar a los locales, que, por si acaso, buscaban la sentencia. No les hizo falta.
Otra escuadra que quiere salir de abajo y recupera la autoestima es el Casalarreina. Lleva dos victorias, ambas en casa y por idéntico marcador (2-1). Si el Balsamaiso fue su primera víctima, en esta ocasión fue el Bañuelos. Los de José Mari Alonso salieron decididos a por el partido. No les queda otra para remontar posiciones. El tanto de Sergio parecía encarrilar el duelo a los 20'. Pero dos minutos después los visitantes empataban para desesperación local, cuya defensa pudo hacer algo más para evitar la igualada. Nuevo partido. Por suerte, para los anfitriones, y desgracias, para los rojillos, Paulo, de falta, colocaba a los suyos por delante al filo del descanso. De esos goles que se denominan psicológicos. La segunda parte fue trabada, con un Bañuelos que quería, pero no podía, y con un Casalarreina expectante. Los minutos fueron pasando y los locales festejaron la victoria, mientras que los visitantes seguro que lamentaron la derrota, ya que su posición en la tabla no es muy agradable, antepenúltimo.
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