miércoles, 21 de noviembre de 2012

Primeros triunfos

Jornada atractiva en Regional por varios aspectos. Más allá de variables clasficatorias hay que dar la enhorabuena a Autol y Calasancio B porque durante el pasado fin de semana, por fin, lograron su primera victoria de la temporada. Mientras que los riojabajeños se impusieron en el Oion Arena ante una Oyonesa B a la que le está costando sumar como local (1 de los últimos 9 puntos), el filial del Calasancio doblegó al Bañuelos, único equipo que todavía no sabe lo que es ganar. No sólo eso, porque los amarillos, de regalo, le cedieron a los de Baños de Río Tobía el puesto de colista. De esta forma, la tabla sufre movimientos por la parte de abajo. Mientras que los rojiblancos, merced a su triunfo en tierras alavesas después de mostrar cierta mejoría en las últimas jornadas, ven más cerca dar caza al Vianés B, los colegiales olvidan sus penas como farolillo rojo y le pasan las preocupaciones a un Bañuelos con poca motivación para lo que resta de campaña, si acaso evitar ese último lugar en la clasificación.

En lo que respecta a la parte de arriba, el Ciudad de Alfaro venció con más problemas de los deseados al Vianés B. El 3-2 final demuestra que los navarros no fueron de vacaciones a La Molineta. Sin embargo, la calidad de los locales se impuso en un choque más trabado de lo que le hubiera gustado al conjunto riojabajeño. El equipo rojillo evidenció, como ha hecho en varias ocasiones, que pueden ser competitivos siempre y cuando actúen como bloque, cuando sufre altibajos se vuelven vulnerables. Pese a la victoria, el líder deja una sensación de ahora se está mostrando más accesible ante sus rivales. De hecho, ha encajado 5 goles en los últimos 3 partidos. Alberite y Tedeón le examinan antes de llegar al ecuador de la competición.

Precisamente, esos dos equipos se midieron en San Miguel con algo más que tres puntos en juego. Los de Carmelo Abascal continúan en dinámica positiva tras su victoria por la mínima y son ya siete jornadas sin perder y cuatro triunfos seguidos. Una racha que les ha colocado segundos en la tabla. El duelo del otro día estuvo marcado por el penalti que detuvo Ángel, ya que pudo haber cambiado el signo del partido. El tanto local, obra de Javi Huergo, sirvió para que los verdinegros, gracias a su capacidad para no encajar goles (2 en los últimos 7 encuentros), se muestren como una opción, cada vez más sólida, al ascenso. Por su parte, el Alberite ve frenada su escalada, lo que le obliga, si no quiere descolgarse, a realizar un esfuerzo máximo antes del final de la primera vuelta frente al líder y el Náxara B.

El que tampoco afloja en sus intenciones es el filial najerino. Suma 10 jornadas invicto y está aliado con esa suerte necesaria para ganar partidos. El ejemplo más claro se dio frente al Casalarreina. El 4-0 final no hace justicia a la dificultad que encontró el Náxara B para imponerse a los de José Mari Alonso. Los visitantes plantaron cara y merecieron un mejor marcador antes del descanso, pero los locales fueron más prácticos y letales ante la meta contraria. El equilibrio en el juego se rompió a la media hora tras un córner. El Casalarreina reaccionó y pudo empatar, pero no estuvo fino en el remate final. Para mayor desgracia visitante, el 2-0, justo antes del descanso, mató el partido porque el segundo tiempo sobró. Sólo hubo un equipo en el campo y eso se notó el marcador final, que fue agrandándose a medida que transcurrían los minutos. El Náxara se pone tercer, mientras que el Casalarreina se queda descolgado para optar a los puestos de ascenso. Mucho tiene que mejorar, en resultados, para volver a ser considerado un candidato.

En cuarto lugar queda el EDF Logroño tras su derrota en Ezcaray. Los de David Juaneda no atraviesan por su mejor momento de la temporada, de ahí su irregularidad en los resultados. No pueden desfallecer en sus intenciones porque antes de acabar la primera vuelta se tienen que medir a dos aspirantes como Cenicero y Balsamaiso. En esta ocasión, el San Lorenzo, después de cuatro derrotas seguidas en casa, recuperó sensaciones y confianza para ser un rival más a batir. La intensidad y el buen hacer ofensivo de los locales fue suficiente para maniatar a un contrincante que afronta el momento de la verdad en las próximas semanas.

Por su parte, el Cenicero también se mete en la pelea gracias a su victoria por 3-1 contra el Balsamaiso. Un choque equilibrado y con alternativas. Comenzaron mandando los locales espoleados por el penalti transformado por Pablo y por un posterior tiro suyo que impactó en el larguero. Los visitantes estaban tocados, pero en acciones de estrategia fueron asomando su peligro. Quizá fue la antesala del tanto del empate de Carlitos antes del descanso. Sin embargo, cuando los blancos estaban más cómodos en Las Viñas se quedaron con diez por expulsión de Heriberto. Comenzaba la segunda mitad con la sensación de que los locales tenían que exigirse un poco más para ganar. Pero, fue el cuadro de Diego Estecha, pese a estar en inferioridad, el que gozó de varias ocasiones para adelantarse, mientras que el Cenicero sólo podía salir a la contra. El partido volvería a dar un vuelco cuando Pablo, en una de las pocas oportunidades de los vinateros, colocaba por delante a los suyos para desgracia de un Balsamaiso que estaba siendo mejor. Por si fuera poco, Nico, ya en el tiempo añadido, hizo el tercero. Demasiado para unos y tan poco para otros. Ahora ambos conjuntos deberán demostrar cuáles son sus aspiraciones reales, ya que los logroñeses, tras dos derrotas, tienen que medirse a Tedeón y EDF Logroño en las próximas jornadas. Mientras, el Cenicero debe continuar con su buen hacer para seguir con opciones.

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