martes, 29 de octubre de 2013

Balance tras 10 jornadas

Datos 10ª jornada de Tercera

Número de goles: 28

Gol más rápido: 1'; Abel (San Marcial) para poner el 1-0 frente a la Oyonesa.

Gol más tardío: 89'Javi Martínez (Náxara) para lograr el 3-0 contra el Agoncillo; y Huete (Calahorra) para colocar el 4-1 frente al Alberite.

Partido con más goles: 8, La Calzada-River Ebro (4-4).

Victoria más amplia: 4-1, Calahorra-Alberite; y 3-0, Náxara-Agoncillo. 

Goleadores de la jornada: Txejo (Haro) marcó 2 goles, los dos de penalti, al Varea; Huete (Calahorra) le hizo otros dos al Alberite; y Javi Tres (River Ebro) transformó dos penaltis ante La Calzada.

Tirón de orejas: Balsamaiso (2 puntos), Pradejón (3) y San Marcial (4) ocupan a día de hoy los puestos de descenso.

Ni fu ni fa: El Anguiano se puede convertir en todo un clásico en esta sección. Ahora pierde, ahora gano. Los serranos, a 4 puntos del 'play off' deben mostrarse como un bloque regular que encadena buenos resultados de forma seguida.

Aplausos: Para el líder Vianés. Los navarros, con confianza y crecidos por el trabajo realizado, abren hueco respecto al quinto clasificado, puesto que son ya 7 los puntos que le separan. Una buena renta para poder tropezar alguna semana.

Sorpresa: Más que sorpresa, habría que calificarlo como voltereta. La Calzada iba ganando 3-0 en apenas 24', pero el River Ebro le dio la vuelta al marcador. Primero había conseguido empatar antes de llegar al descanso y después, mediada la segunda mitad colocó el 3-4. Por suerte, para los locales, Javi San Ildefonso empató en los minutos finales.

Curiosidad: El 'pichichi' Rubén Pérez (Varea) parece que sólo es capaz de marcar si su equipo va a sumar algún punto. En 10 jornadas, no ha marcado en 8 partidos, curiosamente en las dos derrotas de los arlequinados (Anguiano y Haro).

Resumen

Más que un resumen de la jornada, toca empezar a valorar, después de 10 jornadas, si los diferentes clubes están cumpliendo o no las expectativas creadas. Por de pronto, es sorprendente que el Vianés (27 puntos) lidere la tabla en un grupo en el que otros conjuntos sí que están llamados a ocupar esa posición. Se especula con el hecho de que el calendario, en el comienzo liguero ha sido benévolo con los navarros, pero hay que ganar cada partido. Además, en una de sus pruebas de fuego, visita del Alfaro, ha demostrado que es un bloque complejo de ganar y con esa suerte de los conjuntos que tienen confianza. A tenor de la competitividad de los de Iñaki Santibáñez pueden ser considerados como aspirantes al 'play off', margen, de momento, tienen para poder tropezar y seguir con los mejores. Es probable que acuse el paso de la competición, entonces se podrá ver cuál es su verdadero lugar.

El Haro, segundo actualmente (25 puntos), es fiel a su idea. Además, la moral y experiencia ganada tras su fenomenal rendimiento en la Copa del Rey hace que los de Roberto Ochoa sean uno de los favoritos a liderar. La Oyonesa, tercera (24 puntos), sigue la estela de la temporada pasada. Práctico en defensa, intenso en la presión y sabiendo aprovechar las acciones a balón parado, los de Jorge Ochoa son el único equipo invicto del grupo. Por algo será. Los alaveses, pese a necesitar de un delantero que les asegure 10 goles por temporada, está compensando esa carencia con otras virtudes. Si quiere continuar peleando por una plaza de fase de ascenso no puede bajar un ápice su intensidad. Cuarto es el Náxara (22 puntos) en uno gran arranque de campeonato, uno de los puntos débiles de los blanquiazules en las últimas campañas, una cuestión que les obligaba a ir contra remolque. Manteniendo la línea de las pasadas temporada, los de Nacho Ruiz afrontan un mes de noviembre complejo ante rivales de entidad. En función de sus resultados, se podrá saber si los blanquiazules están en disposición de acabar entre los cuatro primeros.

Antes de empezar la liga, se presuponía que el Varea y el Haro iban a pugnar por el liderato. Por eso se podía decir que los hombres de Emilio Remírez (5º, con 20 puntos), pese a comenzar como un tiro, están un peldaño por debajo de lo esperado. Dos derrotas y dos empates enturbian la marcha de una plantilla diseñada para concluir la fase regular en primera posición. Viendo la marcha de otros conjuntos, a los logroñeses les falta ser competitivos y ganar a rivales que pelean por el mismo objetivo. Y eso que en sus filas está un auténtico 'killer' como es Rubén Pérez (14 goles en 10 partidos). El Calahorra (20 puntos) ha ido de menos a más (algunos jugadores se han incorporado con la liga ya empezada). Los de Javier Salvatierra están siendo más prácticos que la temporada pasada y en las primeras jornadas evidenciaron que les faltaba encontrar un goleador. Sin prisas, pero sin pausas, están ahí, a la espera del fallo ajeno para engancharse. Pese a que su estilo pueda ser menos vistoso, han ganado en competitividad.

Séptimo (18 puntos) queda el Anguiano. Se esperaba que los de Juan Carlos Herrero recuperaran su sitio en Tercera y regresaran a la senda de 'play off' después de dos años fuera de los puestos de privilegio. Ilusión y caras nuevas hay en una plantilla capacitada para estar luchando por ese reto. Pero para eso es necesario que el equipo encuentre la regularidad en los resultado. De poco sirve ganar al Varea o al Vianés si una semana después pierde frente al Berceo, por ejemplo. Si encuentra esa regularidad, el cuadro serrano estará en condiciones de pelear. Octavo, también con 18 puntos, queda el Alfaro. Eduardo Arévalo ha tenido que reinventarse, una campaña más. Y mientras el resto de bloques han ganado en competitividad, parece que los blanquillos han perdido un poco de 'punch' en la parte de arriba. La juventud de Iván Garrido (Urtasun no acaba de rendir lo que debería) no parece suficiente para intimidar a los rivales. Pese a los intentos de imponer el ritmo, dar velocidad al juego y tener buenas intenciones, los riojabajeños ya se han dejado 7 puntos en La Molineta, quizá demasiados. El resto de rivales aprieta y el Alfaro, para estar con los mejores, no puede permitirse más tropiezos.

Una de las sorpresas de la temporada es el Ciudad de Alfaro (17 puntos). En apenas 10 jornadas ya han hecho parte del trabajo para lograr la salvación. Cierto que ha contado con la fortuna de un calendario benévolo, pero hay que ganar ese tipo de partidos. Los de 'Yuyo' Jesús Díaz han sabido jugar ante sus rivales y han cogido la confianza suficiente como para salir a competir ante cualquier rival. Están de dulce y deben aprovecharlo. Enhorabuena. El Agoncillo es décimo (14 puntos), probablemente un lugar por debajo de lo esperado y por lo trabajado sobre el terreno de juego. Los avioneros, siguiendo la estela de la temporada pasada, son un bloque intenso, aguerrido y con peligro en ataque. Como ya ocurriera el curso pasado, su rendimiento parece mejor como visitante (triunfo en La Molineta) que como local. De hecho, a nada que mejoran sus resultados en San Roque, el conjunto de Israel Villarreal irá escalando en la tabla (ahora afronta unos compromisos más accesibles sobre el papel). el problema puede encontrarlo ante la falta de un objetivo clasificatorio.


Berceo y Arnedo (ambos con 13 puntos) se encuentran en una zona tranquila. Verdes y blanquillos tienen algunas similitudes en su rendimiento, cierta irregularidad. Los de Víctor Ubis, una plantilla muy joven, muestran altibajos dentro de los 90 minutos y, a veces, lo han pagado caro. Eso sí, cuando mantienen el tipo son capaces de competir contra cualquiera. Por su parte, los de José María López Calahorrano combinan buenas actuaciones con partidos para olvidar. Les falta consistencia y estabilidad en el juego. Quizá necesiten tiempo, pero las opciones de estar un poco más arriba se van perdiendo y la falta de un reto deportivo puede ser perjudicial para los riojabajeños. El River Ebro (12 puntos) parece haber encontrado en las últimas jornadas (3 victorias y 2 empates) la manera de ser competitivo en la categoría. Los de Óscar Arpón intentan tratar bien el balón, jugar con velocidad y por los costados. Un equipo combinativo que intenta recuperar la ilusión por el fútbol en Rincón de Soto con gente de la casa. La meta es acomodarse en mitad de la tabla, tratar de arañar puntos a los rivales superiores y superar a los de su liga. Van por el buen camino.

El Villegas (8 puntos) lleva 9 partidos sin ganar (lo hizo en la jornada inaugural). Hasta la fecha ha vivido de sus empates ante Haro, Calahorra y Oyonesa, equipos superiores a los que mantuvo a cero. Esa intensidad está tratando de llevarlo ante otros rivales, pero la falta de gol está privando a los de Alberto Rubio de estar más desahogados en la tabla. En las próximas 5 jornadas se miden a rivales de su liga, por lo que al finalizar este mes de noviembre se sabrá cuál es su sitio. La Calzada (8 puntos) está repitiendo errores y eso es malo para su confianza. Que hasta en 5 partidos (incluso 6 después del 3-0 del domingo y pasar al 3-4, aunque luego acabara en tablas) les marquen dos goles consecutivos es una cuestión que los rojillos deben hacerse mirar. No se pueden regalar los puntos, ya que el trabajo realizado previamente por los pupilos de Josean García no encuentra recompensa. Si encuentra esa estabilidad, seguro que escapan de la parte peligrosa, pero si insisten en mantener los errores, tocará sufrir.

El Calasancio (7 puntos) logró romper su racha negativa de 6 derrotas seguidas (hasta el sexto partido no marcó su primer gol) y ahora, poco a poco, va saliendo del pozo. Pese a tratar de mantener el mismo estilo que la temporada pasada, los colegiales no acaban de encontrar la regularidad y la fortaleza defensiva deseada. Cierto que no ha ayudado tener un comienzo de liga tan duro, pero ahora, en el próximo mes, se puede jugar el escapar de la zona peligrosa o instalarse en ella hasta el final del curso, ya que los de José Quiroga afrontan duelo ante rivales de su llamada liga. Los problemas en ataque (4 goles marcados) también están pasando factura. El Alberite (5 puntos) asumía desde el inicio que su objetivo pasa por llegar a las últimas jornadas con opciones de salvarse. En una competición tan igualada, por arriba y por abajo, sumar dos victorias seguidas puede ser una catapulta para lograr la permanencia. Los de Julio Santolaya tratan de sacar provecho de sus armas, aunque se están mostrando competitivos, por lo general, hasta que el físico les aguanta. Pese a ello, tienen a tres equipos por detrás y eso les debe dar confianza. Cada partido es una final, buena mentalidad para competir, aunque sobre el papel sean uno de los candidatos al descenso.

En puestos de descenso se encuentran San Marcial (4 puntos), Pradejón (3 puntos) y Balsamaiso (2 puntos). Los de Nacho Torres son el equipo que más goles recibe (31), un gran peso que lleva a la espalda. La juventud y las dudas en esa zona han condenado a los de Lardero a estar por debajo de lo deseado. El problema es que son ya varias las temporadas en las que se está jugando con fuego. Sin embargo, este conjunto tiene margen de mejora, para lo que es fundamental hacerse fuertes en defensa. Por su parte, los de Óscar Herreros, como ya pasara la temporada pasada, no están teniendo suerte en determinados encuentros. La debilidad defensiva, en ocasiones, y la falta de remate están condenando a los verdiblancos, que todavía no saben lo que es ganar. Pueden y deben ir a más. Por último, los de Fernando Bezares lograron este domingo, por fin, mantener la portería a cero. Un aspecto significativo para comprender que la permanencia en Tercera no se logra ofreciendo buena imagen y haciendo un fútbol vistoso hasta tres cuartas parte de campo. La salvación se logra siendo fuerte y contundente en las dos área, sobre todo, en la defensiva. Cuando eso se logra, muchas veces, por inercia y confianza, si hay mimbres, se puede pasar a otro nivel. Como le sucede al Pradejón, aún no ha sido capaz de ganar.

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