miércoles, 17 de abril de 2013

Igualdad para empezar

La Copa Regional comenzó el pasado fin de semana y dejó ver a las claras que todos los equipos asumieron el reto de esta competición con ilusiones renovadas, que la Liga ya está olvidad Sólo hay que echar un vistazo a los resultados para destacar que en esta primera jornada ha destacado la igualdad. Tres victorias por la mínima, curiosamente visitantes, dos empates a uno y un triunfo local. Los favoritos, prácticamente todos, hicieron los deberes, con sus dificultades, para ir encarrilando su pase a semifinales, aunque todavía es pronto para ello. Procedo a realizar un resumen general de cada grupo (lamento no ser más concreto en algunos partido, trataré de mejorar la próxima semana).

De este modo, en el grupo I, dos victorias a domicilio por idéntico marcador: 0-1. Lo cual habla de las dificultades que ambos conjuntos tuvieron para sumar los tres primeros puntos. El Casalarreina se impuso en El Poste ante un Bañuelos que no le perdió la cara al partido en ningún momento. Desde el principio, fueron los amarillos los que controlaron el partido y los que gozaron de alguna oportunidad, aunque los locales también pudieron desequilibrar la contienda con alguna acción personal. Sin embargo, Rodri, tras un córner, a la media hora, marcó para alegría de los de José Mari Alonso. Hasta el final, el Casalarreina controló, mientras que el Bañuelos, impotente, buscaba sus opciones, aunque sin generar ocasiones de gol. Aun así, el marcador se podía alterar en cualquier momento. Los visitantes cumplieron y continuar con su inercia positiva del final liguero. En el otro encuentro, el San Lorenzo perdió ante su afición contra un Alberite que mostró sus virtudes, una vez más. Los arlequinados están de dulce, saben que siempre tienen opciones en ataque, por lo que su objetivo es asegurar la defensa, siendo prácticos y efectivos. Los riojalteños tenían la oportunidad de empezar de cero, olvidar la amargura liguera y tratar de mostrar otra cara en Copa. Lo intentaron, pero el resultado, una vez más, les fue esquivo como anfitriones. Sin duda, un aspecto que les ha lastrado y que les está mermando como colectivo. Pese a ello es un partido y por el bien del interés del grupo, hay que confiar que los ezcarayenses compitan hasta la última jornada con ganas.

Por su parte, en el grupo II, el Balsamaiso demostró que quiere meterse en semifinales. El 3-1 contra el Cenicero dejó a las claras que apuesta por este torneo. Por su parte, los vinateros, que quizá no mereciera una derrota por ese resultado, intentaron recuperar las sensaciones de algunas pasajes ligueros. Pero los locales, eficaces, prácticos y directos hicieron su trabajo pese a algunas apreturas. En este sentido, los visitantes deberán mejorar su parcela ofensiva para presentar pelea en un grupo complicado en el que cada partido se puede decidir por pequeños detalles. De hecho, el Náxara B sumó un punto frente al Tedeón después de que los blanquiazules lograran empatar en los minutos finales ante un conjunto que mostró mejor cara respecto a los últimos duelos de Liga. Los de Carmelo Abascal, más metido, más conscientes y con más actitud pudieron haber ganado en La Salera, pero sus errores ofensivos les condenaron en la recta final del choque.

Finalmente, en el grupo III, el Ciudad de Alfaro cumplió el expediente en su visita a La Estrella, donde el Calasancio B le puso en problemas. El 0-1 demuestra que los colegiales han mejorado sus prestaciones. Puede que los resultados no salgan, que en ataque muestren sus limitaciones y que en defensa, a veces, regalen ocasiones, pero la evolución y las ganas de los amarillos es digna de alabar, ya que eso les hace crecer como grupo para ser competitivo en cada partido. Los alfareños, por su parte, desde que lograron el ascenso han bajado el ritmo y la intensidad, lo que provoca que sus rivales pueden estar a a su altura. Asimismo, la Oyonesa B y el Vianés B repitieron empate de la última jornada liguera. Si en la competición regular las tablas fueron a cero y en tierras navarras, el domingo pasado el duelo acabó 1-1 en tierras alavesas. Los blanquiazules desperdicieron una gran oportunidad para ganar enteros para ser, como mínimo, el mejor segundo de todos los grupos en un choque en el que nunca estuvieron a gusto, mérito del filial rojillo, que suele exprimir sus recursos. Los de Jesús Duque no cuajaron un buen partido y eso se acusó en el marcador final. Quizá les haya servido para recuperar su identidad, ya que sin ella son vulnerables.

No hay comentarios:

Publicar un comentario