jueves, 14 de febrero de 2013

Vale ya de forofismos

Que el fútbol es algo más que un deporte parece asumido por todos, tanto por los que nos gusta como por sus detractores. Que el fútbol, visto desde el punto de vista del espectador, tiene connotaciones emocionales es algo evidente, de lo contrario cómo se entendería que haya sentimientos diferentes en función de un resultado. En este caso, el corazón, en la mayoría de las ocasiones, supera a la cabeza, se deja llevar. Perfecto y asumido. Como es lógico, un partido ofrece múltiples versiones, todas más o menos respetables siempre y cuando no falten a la verdad. Pero cabe entonces descifrar cuál es esa verdad. Los hechos están ahí (el marcador, tiros a puerta, saques de esquina, número de faltas...), es decir, las cosas que se pueden medir, que no se pueden discutir. Claro que este tipo de cuestiones son más fáciles de saber cuanto más elevada es la categoría. Con lo que, por ejemplo, en categorías inferiores, en Regional o incluso en Tercera, contento con poder contabilizarlo de manera manual. Sin embargo, por qué será que las interpretaciones, las opiniones sobre cómo ha ido un determinado encuentro son variadas, diferentes e incluso, si se apura, hasta exclueyntes unas de otras. 

¿A qué obedece este tipo de comportamiento? El principal es el forofismo. Se nota cuando da la casualidad de que siempre se barre para casa; cuando siempre hay terceras personas (árbitros) que han lastrado la labor del equipo; cuando uno sólo ve las cosas positivas de su club y no las negativas; cuando se buscan culpables, tanto internos (del propio equipo) como externos... Hay miles de maneras de comprobar que el forofo (según el Diccionario de la Real Academia Española 'partidario entusiasta de un equipo deportivo') responde a unos patrones concretos (no soy sociólogo así que desconozco las pautas que siguen). Pero no me quiero desviar. Existen otros factores que a muchas personas los árboles no les dejan ver el bosque. La falta de conocimiento es uno de ellos. Lo de 'todo el mundo sabe de fútbol' habría que acotarlo a 'todo el mundo habla de fútbol'. Son cosas distintas. Esto puede generar un debate interminable: ¿quién sabe de fútbol? ¿cómo se puede saber si uno sabe o no de fútbol? ¿conocer los datos se puede considerar saber de fútbol? Miles de preguntas que ofrecen una gran variedad de respuestas con muchas aristas. Pero sí que es evidente que ver muchos partidos de fútbol no es sinónimo de saber del tema. Que ayuda, por supuesto. Pero hay más cosas.

Sin embargo, estas dos causas suelen ir asociadas. Me explico, porque parece que digo que el forofo no tiene conocimiento sobre el fútbol. El forofo tiende a perder la razón, a imponer sus criterios (bueno esto es algo habitual y una lástima porque no permite escuchar y tener una mente abierta con capacidad para aprender), a justificar lo injustificable, a exagerar y distorsionar la realidad (por ejemplo, la sensación de dureza, posibles penaltis no pitados...). Además, nunca, o casi nunca, hay argumentos de peso, razonados, consecuentes. Imperan más el 'porque sí' y los juicios de valor ('es muy malo'). La crítica es constante y, muchas veces, gratuita, además de ser la inmensa mayoría de las veces destructiva. No hay reflexión, autocrítica, argumentos constructivos... Es más fácil escudarse en lo ajeno y echar la culpa a otras cosas.

Entiendo que una conversación de fútbol puede ser maravillosa, pero a su vez puede ser motivo de discusiones o de alteraciones cardíacas. Además, el escenario en el que se dé esa charla/debate da igual. Incluso algo aparentemente serio como puede ser una tertulia con 'supuestos' expertos en la materia puede ser más insufrible, cansina e incluso dar vergüenza ajena cuando el comportamiento de forofo sale a relucir. Aunque claro parece que lo que vende es eso: proclamar a los cuatro vientos cuál es tu equipo y defenderlo siempre. No sólo eso, además hay que atacar a tu rival, de lo contrario parece que no defiendes lo tuyo. Muy triste. Apelar a la objetividad, siempre lo he dicho para mí no existe en el momento que uno firma o habla sobre algo, es complicado. Por eso, soy partidario de ello, hay que buscar la imparcialidad. Espero que estas líneas sirvan para reflexionar y para despertar. Ojo, no pienso en el fútbol de élite, en el que se televisa, lo hago echando un vistazo a lo que ocurre en el fútbol base, a esas categorías con poca difusión pero tan importantes para que este deporte siga vivo, porque más allá de otros aspectos lo que está encima de la mesa es qué educación queremos transmitir.

1 comentario:

  1. Suscribo todo lo que dices Zoco. No todo vale y hay que tener perspectiva. Un saludo muy grande

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