Fin a una gran racha

El líder Ciudad de Alfaro, todavía con margen en la primera plaza, ve peligrar su sitio. La Molineta, su fortín particular, dejó de ser su talismán el sábado después de 10 victorias consecutivas y de una marca espectacular (37 goles a favor y 7 en contra). Llegaba a la localidad riojabajeña un Balsamaiso herido después de su última derrota en casa en el tiempo de añadido frente a uno de los 'gallos', el Alberite. Los de Diego Estecha dieron lo mejor de sí mismos para en 38 minutos colocar un 0-3 con tantos de Verguizas, en dos ocasiones, y Omar. Pese a ello, los locales reaccionaron y antes del descanso ya habían recortado la diferencia, 2-3. La insistencia alfareña dio sus frutos y en el 53' se produjo el empate. Todo hacía indicar un posible hundimiento de los visitantes, sin embargo un par de jugadas después Omar, en lo que sería su segundo tanto de la tarde, volvía a colocar a los suyos por delante. Hasta el final del choque, el líder intentó buscar la manera de batir a Dani, pero el Balsamaiso se aplicó en defensa para evitarlo. Un triunfo blanquillo que da alas a los logroñeses para confirmarse como uno de los aspirantes al ascenso. Habrá que ver cómo reacciona el Ciudad de Alfaro en las próximas jornadas por si amarra el primer puesto o sigue cediendo puntos.

El que sigue a su ritmo, con su inercia, con una dinámica espectacular es el Alberite. Los arlequinados alcanzaron su sexta victoria seguida y octava jornada sumando. La víctima fue un EDF Logroño que encadena su quinta derrota a domicilio y que no vence como visitante desde el pasado 7 de octubre. Esos malos resultados lejos de El Mundial'82 le están pesando. Demasiado. Y eso se acusa en la tabla, donde ha descendido a la séptima posición. Pese a ello se mantiene a 5 puntos del ascenso, aunque su racha debe cambiar si de verdad quiere ser tomado como aspirante. En el duelo del domingo, un solitario gol de Óscar fue decisivo para que el Alberite se hiciera con los 3 puntos, se consolide como segundo y siga ampliando distancias con el cuarto clasificado (5 puntos). Los de David Juaneda buscaron la manera de empatar, pero los locales trabajaron para evitarlo.

El Cenicero, cuarto en la tabla, desperdició un 0-2 para haber metido más presión a los equipos que le preceden en la clasificación. En esta ocasión, el Náxara B tuvo confianza para no bajar los brazos pese al marcador adverso. Los vinateros empezaron más metidos en el partido, con las ideas más claras. Así se entiende que en una de las primeras llegadas al área rival Pichi adelantara a los suyos. Un gol que sirvió para envalentonar a los blanquiazules, aunque les faltaba el remate final, pese a que percutían por su costado derecho con insistencia. El inicio del segundo tiempo sirvió para que el cuadro de José Luis Marcos, tras un saque de esquina, ampliara su renta. Parecía el final del choque gracias a la efectividad de un Cenicero que tenía que acabar de hacer su trabajo. Pero los najerinos tiraron de orgullo y buscaron la meta de Manolo con insistencia. Aunque se hizo esperar, Trini recortaba en el 80' y Javi Torre lograba la igualada en los minutos finales. Un marcador que debe hacer reflexionar al Cenicero, que si quiere ascender no puede permitirse dilapidar un 0-2. Eso sí, el Náxara B evidenció que no se da por perdido.

La Oyonesa B, por su parte, alcanzó su cuarto triunfo consecutivo para demostrar que quiere acabar lo más arriba posible en la tabla. De momento, ya es sexto y sólo le separan dos puntos del cuarto. Esta vez superó a un San Lorenzo, que jornada que pasa va perdiendo opciones para ser considerado candidato al ascenso. De hecho, en la segunda vuelta sólo suma 3 puntos (aunque cuenta con un partido menos). En el Oion Arena se vio a un conjunto local muy 'enchufado'. Dani ponía el 1-0 a los 5'. Los ezcarayenses reaccionaron desde los once metros, pero ante de la media hora, otra vez Dani (segunda jornada seguida que marcad dos goles) volvía a poner por delante a los locales. El choque mantuvo el equilibrio. El San Lorenzo buscaba el empate, mientras que los alaveses intentaban aprovechar las contras para sentenciar. Finalmente, Arkaitz, en los minutos finales, daba la tranquilidad a los suyos y mermaba las opciones de los de Juan Martínez. 

Seis jornadas después y un partido aplazado, el Tedeón recuperó la sonrisa. Lo hizo con un claro 3-0 frente al colista del grupo, Calasancio B. Los de Carmelo Abascal se reencontraron con la victoria. Un triunfo que, de lograr los 3 puntos que tiene pendientes, le volverían a dejar 5 del ascenso. Es un paso que los verdinegros insisten en mantener intactas sus opciones, aunque la empresa se ha puesto realmente complicada. Asimismo, el Vianés B rompió su mala racha de 11 partidos sin ganar y superó, en un duelo con muchos goles, 4-2, a un Bañuelos, que como visitante es incapaz de sumar algún punto. Los navarros, que llegaban a la cita después de dos empates, certificaron que son competitivos y que tienen gol. Además, a efectos clasificatorios se acercan al Autol.

Precisamente, los catones perdieron en El Soto ante un Casalarreina que apura sus posibilidades de ascenso y que encadena su tercer triunfo seguido. Los hizo, fiel a sus últimos resultados, con goles tanto en una como en otra portería y remontando. De hecho, el choque se les puso cuesta arriba cuando Calvillo ponía, desde el punto de penalti, el 0-1 nada más comenzar el encuentro. Los de José Mari Alonso tenía que dar el máximo si querían dar la vuelta al marcador. Durante la primera mitad gozaron de oportunidades para empatar, pero la igualada no llegaría hasta la segunda parte cuando Shuster, de cabeza, daba motivos a los suyos para creer. Los rojiblancos lo intentaban, pero les costaba aclimatarse al juego que obligan las dimensiones del campo. Gerardo, de penalti, volteaba el marcador para alegría de los locales y tristeza de los visitantes, que también tuvieron su oportunidad para empatar en los minutos finales y que se quejaron de la dureza de los amarillos (dos jugadores visitantes acabaron en el hospital) y de la permisividad arbitral.