jueves, 18 de diciembre de 2014

Miércoles para olvidar

Hay días que es mejor no salir de casa, ni siquiera intentarlo. Algo similar debieron pensar Varea y Haro, los dos representantes riojanos en la Copa Federación nacional, hasta ayer. Los dos conjuntos poco pudieron hacer ante unos rivales muy superiores que dominaron de principio a fin los partidos de vuelta. Mientras que el líder del grupo riojano venció en la ida (1-0) la Arandina e iba con una renta mínima, pero con el convencimiento de que era suficiente, el Haro ya tenía la eliminatoria muy cuesta arriba tras la derrota sufrida en las instalaciones de Tajonar frente a Osasuna B. Cierto que los de Iñaki Pacheco jugaban en El Mazo, pero el técnico pensó más en el duelo, importante, del domingo en Las Gaunas que en, de verdad, doblegar a los rojillos.

Con esa tesitura, Osasuna B no dio opciones, por si acaso los jarreros pensaban en la remontada. Pablo, antes del minuto 10, ya ponía muy cuesta arriba la eliminatoria para los locales. Pese a que Dani Gómez tuvo el empate acto seguido, quizá la historia se hubiera escrito diferente, el caso es que a la media hora, los navarros dejaron sentenciado el encuentro y el pase a la siguiente ronda con el tanto de Satrústegui. En el descanso, el preparador blanquinegro hizo debutar a los hermanos Santurde, ambos juveniles, con lo que el pensamiento estaba puesto en minimizar riesgos, que no hubiera lesiones, dosificar esfuerzos y tratar de mostrarse lo más competitivo posible. 

Perfecto planteamiento de no ser por el 0-5 de parcial que le endosó Osasuna B al Haro en la segunda parte. Satrústegui, en el 47', desmoralizaba, Imanol y Majón, con dos tantos seguidos llegando al minuto 70, empezaban a sonrojar a los aficionados, valientes, que se habían acercado a El Mazo. De nuevo, Majón y finalmente Borja completaron un marcador vergonzante para el Haro. Habrá que ver si este resultado pasa o no factura en liga.

Por su parte, el Varea también sucumbió. Esta vez la derrota frente a la Arandina se gestó en el comienzo apabullante de los ribereños. Aprovecharon su conocimiento de El Montecillo para sorprender con un ritmo endiablado al cuadro de Nacho Ruiz. Mucha presión, asfixiante, juego por bandas y llegadas al área rival protagonizaron unos minutos en los que los arlequinados no podían asumir el control del juego, no podían tener la pelota, dominarla, combinar tres o cuatro pases seguidos. Ruba, en un balón a la espalda de la zaga visitante, encaraba a Baka, le regateaba y le batía a los 7 minutos. Mala noticia para los riojanos. La Arandina insistía en la presión y continuaba robando a la vez que obligaba a su oponente a retroceder. 

Alcanzar el descanso y sacudirse de los locales era el único objetivo del Varea. Pero Ruba dio un pase atrás para que Dani Terleira pusieran el 2-0 en el 42'. Mazazo visitante. El conjunto de la barriada logroñesa estaba un gol de la clasificación y salió en la segunda parte mentalizado para ello, sin embargo, un error, no habitual, en la zaga riojana acabó por hundir a un Varea que veía casi imposible el pase a la siguiente ronda cuando Dani Terleira hacía el 3-0. Cierto que los riojanos se estiraron un poco y que alguna oportunidad para recortar tuvieron, una falta lanzada por Esaúl, un remate de Pardo... pero poco bagaje para el que acostumbra el líder del grupo riojano.

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