La Unión Deportiva Logroñés buscará resarcirse de su única derrota liguera ante el colista del grupo, el Sporting B, un rival más complicado de lo que dicta la clasificación. La buena marcha de los riojanos necesita de un triunfo ante su afición para confirmar sus aspiraciones. En Tercera, destaca el duelo entre Varea y Haro, dos equipos llamados a estar en las primeras posiciones a finales de la temporada. Por jugar como loca, es el cuadro arlequinado el más exigido, aunque los jarreros llevan terreno perdido. El Náxara juega en La Ribera y dados que en los últimos dos partidos ha ganado en los instantes finales, el encuentro se presenta interesante. El Anguiano buscará un nuevo triunfo en Isla ante el Calasancio, mientras que el Tedeón, acomodado en mitad de la tabla, buscará dar la sorpresa ante el Calahorra. Asimismo, River Ebro y Oyonesa intentará alcanzar el triunfo, mientras que La Calzada quiere seguir su buena racha en El Rollo ante un Agoncillo que aún no ha ganado. En Copa Regional, el grupo I juega todos sus partidos; el Alberite pone en juego su liderato en Ezcaray ante el San Lorenzo, el Bañuelos recibe a un Cenicero que quiere más, mientras que el Náxara B, tras dos dolorosas goleadas, se mide a un San Marcial que va encontrando sensaciones.
Segunda B
UD Logroñés-Sporting B (Las
Gaunas, 18.00): Las derrotas se olvidan con un triunfo. Es fácil decirlo, lo complicado es llevarlo a la práctica. Con esa mentalidad y con la conciencia tranquila porque el trabajo es el indicado, independientemente del último resultado negativo en el Carlos Tartiere, la UDL buscará otra victoria que le mantenga en los primeros puestos del grupo. En estos momentos, ser primero, segundo o tercero es lo de menos, lo importante, si quiere optar a entrar en la mejor posición posible en mayo, es estar revoloteando el liderato. Luego ya habrá tiempo y jornadas para luchar por el puesto. Hasta diciembre, son meses en los que no se puede dar tregua a los rivales, sobre todo, en casa. El objetivo es hacerse fuerte ante tu afición, sumar de tres en tres y rascar, lo que se pueda a domicilio. Con esa confianza que dan los resultados y con la maquinaria engrasada, gracias al trabajo realizado durante la semana, los jugadores saltan al campo convencidos del triunfo; y eso ya es un paso. Se podrá ganar o no, pero se intenta, se pone toda la carne en el asador y se buscan alternativas.
Pero siempre asumiendo que enfrente hay un rival. En este caso, el Sporting B. Un vistazo a la tabla indica que los pupilos de Tomás Hervás van últimos y que aún no han ganado ningún partido. Pero son un filial y eso complica. Además, sus tres recientes empates indican que el cuadro asturiano va a más, que ha olvidado las cuatro derrotas iniciales (le hicieron 12 goles, 3 por partido) y que quiere empezar a remontar el vuelo. Plagado de futbolistas jóvenes con hambre y con talento que intentan practicar un juego más alegre de lo que acostumbra la categoría. Pero a la UDL no le debe asustar y menos al ejercer de locales. Después de una semana tranquila (tras dos seguidas con partidos en miércoles) el equipo blanquirrojo, se supone, estará con la frescura en la piernas suficiente para intimidar a su rival durante los primeros minutos porque hay que marcar el territorio.
Queda por saber si Carlos Pouso, como viene siendo casi una norma no escrita, insiste en mover sus piezas en función del rival, del estado de forma de los jugadores y de lo que haya visto durante la semana de entrenamientos. Piezas de sobra tiene, tanto en la zaga, donde hay variaciones cada domingo, como en la medular (con la baja de Jacobo Trigo) y en la parte delantera, donde Camocuhu y Ubis parecen compartir el '9' y en el que Titi, Íker Alegre y Menudo son fundamentales para encontrar los espacios y la portería contraria.
Pero siempre asumiendo que enfrente hay un rival. En este caso, el Sporting B. Un vistazo a la tabla indica que los pupilos de Tomás Hervás van últimos y que aún no han ganado ningún partido. Pero son un filial y eso complica. Además, sus tres recientes empates indican que el cuadro asturiano va a más, que ha olvidado las cuatro derrotas iniciales (le hicieron 12 goles, 3 por partido) y que quiere empezar a remontar el vuelo. Plagado de futbolistas jóvenes con hambre y con talento que intentan practicar un juego más alegre de lo que acostumbra la categoría. Pero a la UDL no le debe asustar y menos al ejercer de locales. Después de una semana tranquila (tras dos seguidas con partidos en miércoles) el equipo blanquirrojo, se supone, estará con la frescura en la piernas suficiente para intimidar a su rival durante los primeros minutos porque hay que marcar el territorio.
Queda por saber si Carlos Pouso, como viene siendo casi una norma no escrita, insiste en mover sus piezas en función del rival, del estado de forma de los jugadores y de lo que haya visto durante la semana de entrenamientos. Piezas de sobra tiene, tanto en la zaga, donde hay variaciones cada domingo, como en la medular (con la baja de Jacobo Trigo) y en la parte delantera, donde Camocuhu y Ubis parecen compartir el '9' y en el que Titi, Íker Alegre y Menudo son fundamentales para encontrar los espacios y la portería contraria.
Tercera
Villegas-Náxara (La Ribera, 12.00):
El Náxara quiere seguir en lo más alto. Pese a tener que ganar en los últimos
minutos en los dos últimos partidos, los de Iñaki Santibáñez se han
acostumbrado a ganar domingo tras domingo. Enfrente estará un Villegas que
intentará frenar el ritmo de los blanquiazules a su manera. Jugar en La Ribera
no es fácil y es un hándicap para sus rivales, que también asumen que la
concentración y el orden son fundamentales para salir victorioso.
Varea-Haro (Municipal, 12.00): Choque
estrella de la jornada entre dos conjuntos llamados a estar presentes en la
fase de ascenso. Además, hay morbo por cuanto Iñaki Pacheco, ahora en las filas
jarreras, regresa al Municipal. En cuanto al encuentro, el Varea intentará
demostrar que está preparado para jugar este tipo de partidos (tradicionalmente
apenas sumaba ante rivales directos). Con una plantilla repleta de grandes
nombres, los de Nacho Ruiz intentarán ampliar su distancia con un Haro que ya
ha sufrido algún que otro tropiezo, caso de la derrota en casa contra el Náxara
y el empate a domicilio en El Rollo. En este sentido, las prisas son para los
blanquinegros, más exigidos en el aspecto clasificatorio. El cuadro que imponga
su criterio y que se haga con el control del choque seguro que cuenta con más
opciones que su adversario.
River Ebro-Oyonesa (San Miguel,
17.00): El River Ebro busca su primera victoria de la temporada. En el San
Miguel ha evidenciado ser un conjunto altamente competitivo pese a que los
resultados, quizá, no hayan acompañado. Además, como visitante ha demostrado
capacidad para neutralizar marcadores complicados, por lo que ese carácter, a
la larga, debe ser productivo. Enfrente una Oyonesa desconocida por momentos
que ya ha regalado demasiados puntos en el Oion Arena, un aspecto que le obliga
a realizar un esfuerzo extra a domicilio para sumar. Estilos diferentes pero
con el mismo propósito, el triunfo.
La Calzada-Agoncillo (El Rollo,
17.00): La Calzada, tras estar a punto de dar la sorpresa en La Salera tras
encajar el gol de la derrota en el último suspiro y en una acción que ha
suscitado polémica, intentará continuar con paso firme en El Rollo. Enfrente
estará un rival no acostumbrado a convivir en la zona de descenso, como
actualmente le sucede al Agoncillo. Los de Israel Villarreal aún no conoce la
victoria y eso les obliga a ser mentalmente más fuertes de lo que pensaban. Choque
importante para ambos, puesto que el triunfo local les colocaría en la parte media
alta de la tabla y condenaría a los avioneros a continuar una semana más en los
puestos de peligro.
Anguiano-Calasancio (Isla, 17.00):
Casi sin hacer ruido, siendo el equipo menos goleado y sacando los partidos de
casa por la mínima, el Anguiano se codea con los mejores del grupo. Los de Juan
Carlos Herrero saben lo que quieren y cómo lo quieren, algo que demuestran en
cada encuentro. En Isla, hasta la fecha han ganado sus tres encuentros y todos
por 1-0 ante rivales que pelean por salvarse. Este domingo no es una excepción
con la visita del Calasancio, un equipo que se quiere hacer fuerte en La
Estrella, ahí están sus dos últimos triunfo sin recibir goles, y que acostumbra
a ser un contrincante complicado de superar.
Tedeón-Calahorra (San Miguel,
17.00): El Tedeón está crecido tras su buen comienzo liguero y su última
victoria a domicilio ante la Oyonesa. Una confianza que provoca que la visita
del Calahorra llegue en un buen momento. Sin nada que perder, los de Íñigo
Rodríguez tratarán de dificultar la labor a un cuadro rojillo que está obligado
a sumar 3 puntos ante un rival que pelea por otras metas. Además, los de
Eduardo Arévalo vienen de empatar en La Planilla.
Regional
Grupo I
San Lorenzo-Alberite (Municipal,
17.00): El San Lorenzo tratará de dar la sorpresa ante el líder del grupo. Empresa
complicada para los ezcarayenses, puesto que son el equipo que menos goles
marcar del grupo, mientras que el Alberite es el que más anota. Aun así, seguro
que los locales intentan impedir que los arlequinados jueguen cómodos mientras
no reciban.
Bañuelos-Cenicero (El Poste,
17.00): El Bañuelos buscará mantener su condición de invicto en El Poste ante
un Cenicero que, de momento, tampoco conoce la derrota. Los vinateros aspiran a
dar caza al líder Alberite, por lo que tendrán que salir a por la victoria en
un campo al que los anfitriones quieren sacarle mucho partido. De hecho, un
tropiezo de los de Tito Tamargo dejaría a los de Julio Santolaya con un pie y
medio en la final.
Náxara B-San Marcial (La Salera,
17.00): Los de Salva Cilleruelo necesitan un buen resultado. Después de dos
derrotas y 9 goles encajados, los blanquiazules reciben a un San Marcial que
parece ir poco a poco afinando su ritmo competitivo. La solidez de los
najerinos ha quedado en entredicho en apenas dos semanas y la visita de los de
Lardero se convierte en una gran oportunidad para recuperarse ante un rival
difícil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario