jueves, 5 de diciembre de 2013

Previas 6 diciembre

El fútbol no para. Si ayer el Varea disputó el partido de ida de los dieciseisavos de la Copa Federación frente el Amorebieta, el viernes se disputa gran parte de la jornada 16 de Tercera, con hasta 8 partidos. Además, en Segunda B, la Sociedad Deportiva Logroñés se mide al Tropezón para alcanzar su tercera victoria consecutiva, un hito en su corta trayectoria en la categoría. Pero antes de nada, resumiré el duelo de Copa Federación, que deja al conjunto vasco con un pie y medio en la siguiente ronda. Los de Guillermo Zangróniz demostraron ser un conjunto competitivo ante un rival de categoría superior que utilizó el encuentro para dar minutos a los menos habituales e incluso para que dos juveniles vistieran la elástica del equipo senior. El duelo, durante la primera mitad, fue menos brillante de lo esperado; más táctico, con mucho juego en el centro del campo, sin profundidad, con unas defensas más prácticas y con ataques espesos. En el segundo tiempo hubo más alternancia y ocasiones. Los arlequinados golpearon primero, gol de Efrén, pero fue anulado por fuera de juego. Una acción que motivó a los visitantes para adelantar sus líneas y anotar el tanto decisivo, obra de Txema Pan tras recoger un rebote en el segundo palo. Hasta el final, el conjunto local intentó empatar, pero la solidez de los visitantes impidió que las tablas llegaran. Ahora, el Varea debe pensar en su compromiso liguero y aparcar la Copa Federación hasta el próximo 18 de diciembre.


Segunda B

SD Logroñés-Tropezón (Las Gaunas, 17.00): La SDL sigue a lo suyo. No quiere salirse del camino marcado por el trabajo realizado, por lo que, como de costumbre, piensa en el presente, en su próximo partido, sin mirar hacia atrás y sin reflexionar sobre lo que le espera. El grupo de Agustín Abadía es así, para lo bueno y para lo malo. Por eso, el haber logrado dos victorias seguidas podría provocar que los blanquirrojos salieron confiados frente al Tropezón. Nada más lejos de la realidad. Sin han sabido cambiar de mentalidad tras recibir goleadas y darlo todo sobre el campo, ahora que los resultados acompañan, la motivación por seguir sumando es máxima. Eso requiere trabajo, intensidad y acierto, tanto en defensa como en ataque. Y los riojanos lo asumen porque saben que en el momento que bajan un poco se vuelven vulnerables. Hay quienes les acusan, no sé cuál es la finalidad, de ser jugadores que van al límite, como si eso fuera algo malo. Es lo que hay. Cada equipo juega con sus armas y la SDL, dentro de la legalidad, sabe que la agresividad defensiva, siempre con balón de por medio, es fundamental para poder presionar, robar balones y buscar los espacios de la defensa contraria. Enfrente estará un Tropezón que no sabe lo que es ganar a domicilio (lejos de su casa sólo ha sumado 3 empates) y que está en puestos de descenso. Además, los dos últimos resultados (derrotas 3-0 y 0-5) habrán saltado las alarmas, por lo que acuden a Las Gaunas en busca de una mayor solidez defensiva, por lo que los locales deben estar preparados para esa circunstancia, lo cual quiere decir que la SDL deba prestar más atención, que en otros encuentros, a la posesión de la pelota. Veremos. Asimismo, que el defensa Pablo Crespo parezca que se vaya a marchar en el mercado de invierno al Celta B puede provocar un punto más de nerviosismo en los visitantes.


Tercera

Calasancio-Balsamaiso (La Estrella, 12.00): Separados por 3 puntos, el choque puede resultar decisivo para ambos. Si los colegiales logran romper su racha de cuatro partidos sin ganar, aumentarían su renta hasta los 6 puntos y dejarían tocado a su rival. Pero si los blancos logran sus primeros puntos a domicilio ambos equipos se igualarían con 12 puntos. Choque de tensión y de emoción. A los de José Quiroga les debe dar confianza el empate logrado en Isla para tratar de recuperar su identidad. Por su parte, los de Fernando Bezares, tras dos victorias en casa, necesitan empezar a obtener resultados a domicilio para continuar superando metas.

Ciudad de Alfaro-Calahorra (La Molineta, 12.00): Los locales acumulan 7 jornadas sin ganar y afrontan un final de primera vuelta complicado ante rivales mejor clasificados. Pese a ello, los de 'Yuyo' Díaz cuentan con margen para jugar con confianza y tratar de competir con cualquier oponente. El Calahorra, por su parte, está obligado a sumar de 3 en 3. Los rivales para meterse en la fase de ascenso aprietan y las tres últimas derrotas a domicilio, unido al empate del domingo pasado requieren de un triunfo balsámico para seguir en la pelea. No será fácil para el cuadro rojillo ante la ilusión de los locales por quebrar su mala dinámica.

Villegas-Anguiano (La Ribera, 12.45): Después de dos victorias consecutivas y tres partidos sin perder, los de Alberto Rubio intentarán seguir con su buena racha ante un rival que quiere estar arriba pero que no acaba de dar el paso definitivo. Es de suponer que los encarnados pongan impedimentos al juego de los serranos, a los que en determinados encuentros se les nubla cuando tienen que culminar las jugadas. Esa falta de puntería le está pasando factura a un Anguiano que quiere recuperar su sitio entre los mejores. Por su parte, el Villegas, capaz de empatar ante los mejores, tiene una buena oportunidad de demostrar sus mejores cualidades.

Pradejón-San Marcial (Municipal, 16.00): Duelo por evitar el descenso. El Pradejón, con la confianza que da ganar en un campo complicado como San Roque, espera no volver a caer en la irregularidad habitual que provoca que los verdiblancos sen capaces de mostrarse competitivos un día sí y al siguiente no. La importancia de Noé frente al Agoncillo debe servir para que el futbolista vuelva a ser determinante, como lo fuera la campaña pasada. Enfrente, un San Marcial en buena dinámica (7 de los últimos 9 puntos en juego) que cuenta con dos referencias importantes en ataque, Abel y Javi Cuadrado, que son dos amenazas constantes para sus rivales. Además, el cuadro de Nacho Torres ha mejorados sus prestaciones defensivas, lo que le da más empaque, además de confianza en lo que hacen.

River Ebro-Alfaro (San Miguel, 16.00): El Alfaro se ha colocado tercero en la tabla gracias a sus últimas 5 victorias. Triunfos, algunos de ellos, sufridos, pero que demuestran que los hombres de Eduardo Arévalo no ganan con tanta suficiencia como en otras temporadas. El aspecto positivo es que ahora están obligados a ser un conjunto competitivo en todo momento. El River Ebro, por su parte, no atraviesa por su mejor momento. Dos derrotas seguidas y 6 jornadas sin ganar... y lo que es peor son sólo 3 puntos de margen respecto al descenso. Un acicate más para empujar y volver a hacerse fuertes en el San Miguel.

La Calzada-Agoncillo (El Rollo, 16.30): La Calzada lleva cinco partidos seguidos sumando en El Rollo. Puntos que le permiten estar a salvo, aunque a sólo dos del descenso. Eso requiere que los de Josean García deben mantener esa racha. Enfrente, un Agoncillo al que no le están saliendo bien las cosas. Le pone empeño, trabaja para obtener mejores resultados, pero la falta de remate, algunas veces, y la falta de contundencia defensiva, en otras, le pasan malas jugadas. Tanto que acumulan un único triunfo en 10 jornadas, en las que no han podido mantener la portería a cero. Los de Israel Villarreal, además, vienen de perder en casa, por lo que las ganas por virar esta dinámica será máxima, aunque esa presión puede ser un obstáculo para su progreso.

Arnedo-Haro (Sendero, 17.00): Tres triunfos seguidos en Sendero, pese a las 4 derrotas consecutivas a domicilio, permiten al Arnedo colocarse en mitad de la tabla. En esta ocasión, el rival exigirá más que sus anteriores víctimas, por lo que los de José María López deberán dar el máximo para sumar. El Haro, por su parte, insistirá en mostrar sus virtudes para tratar de superar al Vianés en la tabla, si tropieza ante la Oyonesa, y consolidarse en la primera plaza. Los de Roberto Ochoa, como la inmensa mayoría de los partidos, buscarán encarrilar pronto el duelo, por lo que los locales deberán estar concentrados durante los primeros minutos.

Vianés-Oyonesa (Príncipe de Viana, 17.00): Derbi. Un choque esperado por las dos aficiones en el que, habitualmente, más allá de la clasificación de ambos, saltan chispas. Acostumbran a ser partidos intensos, vibrantes, emocionante, con pocas ocasiones, a veces trabados y embarullados. Las estadísticas están con los visitantes (los navarros aún no han ganado en Tercera en el Príncipe de Viana a los alaveses), pero tal y como andan ambos equipos todo es posible. Los de Iñaki Santibáñez están disfrutando y saboreando lo que significa ser líder del grupo. Esa confianza les prepara para tener la capacidad de ganar a cualquier rival. Trabajo, sacrificio, actitud, desborde y velocidad en los metros finales son parte de sus virtudes. Mientras que los de Jorge Ochoa basan su juego en la intensidad, en el cuerpo a cuerpo, en el ser superiores en cada jugada, ganar la posición metro a metro. Es decir, se presupone un duelo en el que un error puede resultar crucial para el devenir del encuentro. Las acciones a balón parado también tendrán su relevancia, puesto que son dos conjuntos que las gestionan muy bien. 

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