Triunfo cómodo y necesario

Segundo asalto y la Sociedad Deportiva Logroñés sigue en pie, con buena cara, sin haber recibido golpes, consciente de que para llegar al final y no caerse debe esforzarse, trabajar y correr como el que más. No hay otra vía. Sus golpes quizá no sean técnicos (le cuesta demasiado en ataque posicional y por eso su juego es más directo) son más por aprovechar las debilidades de sus rivales, de saber mantener la guardia a distancia para evitar que su oponente entre en el cuerpo a cuerpo. Los hombres de Agustín Abadía, como demostraron ante el colista Noja, se dejan querer para después con espacios, con balones a las espaldas de los defensores apuntillar para buscar el ko. Parece sencillo cuando enfrente hay un adversario vulnerable, excesivamente frágil de cabeza, que no aprende de sus errores e insiste en adelantar la defensa para que el cuadro blanquirrojo se presentara ante Rafa, una y otra vez, sobre todo en la primera media hora, con mucho peligro. Cosas que son consecuencia de una nefasta planificación en el apartado económico que ha derivado en un sinfín de calamidades deportivas. Sólo así puede entenderse que el Noja sume 25 partidos sin ganar. Por algo es.

Porque es un conjunto diseñado para tratar de acabar la temporada con la mayor dignidad posible, pero esta categoría, como siempre se ha dicho, condena los errores. Y cuando un equipo redunda en ellos, lo habitual es que su contrincante, a nada que esté entonado y que no caiga en la relajación, solvente su compromiso sin apuros. Cierto que ayer la SDL tuvo la fortuna de marcar en su primera llegada. Un gol que, sin duda, dio tranquilidad a los locales y rompió de un plumazo el plan previsto por su rival: mantener el mayor tiempo posible la portería a cero, generar nervios y ansiedad en su rival y esperar su oportunidad. Así había logrado dos empates consecutivos. Pero el único fallo del mejor jugador del partido, el portero Rafa, condenó a los cántabros. Jugada que se repitió en los primeros minutos hasta la saciedad. Balón largo a la espalda del lateral, centro y remate. En el 4' Laencina se sacó de la chistera un centrochut que sorprendió a Rafa, el cual dejó la pelota muerta a un metro de la portería. Javi Torres, que estaba allí, volvía a sonreír después de estar algo más de cinco meses y medio sin ver puerta (desde el pasado 30 de octubre). El delantero agradeció el regalo para encarrillar el duelo.

Sin prisas pero sin pausas, la SDL vio el agujero y cada vez que conectó con criterio hacía daño a un Noja que adelantó, en exceso, su línea defensiva. De nuevo, desde el costado izquierdo el conjunto local se acercaba a la tranquilidad. Ahora, minuto 17, era Javi Torres el que centraba y Tamayo el que rematada de cabeza picado para que Rafa desviara, aunque el colegiado no señaló córner. Después fue Loza el que se topó, tras tocar en un defensor, con el larguero tras un rechace de una falta lateral. Y en el 26' Laencina tras el enésimo cambio de orientación superó a su par para presentarse ante Rafa, aunque equivocó la manera de acabar la jugada, puesto que intentó una vaselina cuando lo recomendable hubiera sido asegurar el tanto por abajo. Entró entonces, ante las ocasiones tan evidente, el partido en una fase en la que el Noja quiso tocar más en la medular, aunque lo hacía sin profundidad y sin ideas para presentarse ante Mandaluniz, casi inédito. 

Sin embargo, cada vez que había un envío largo traía problemas para los visitantes. Así fue como Tamayo dibujó la antesala del 2-0. Su remate, cruzado, lo despejó Rafa con acierto a córner. Ahí, Laencina la puso y Metola, por encima de todos, golpeó de cabeza para poner el balón en la escuadra y asegurar el triunfo antes del descanso. Restaban 45 minutos y sólo una debacle, improbable ante la impotencia ofensiva del Noja, podía impedir la victoria riojana. Se podía intuir una mayor intensidad visitante, pero no la hubo. LA SDL continuó a los suyo, quería 'matar' el partido. Curioso que ahora las oportunidades llegaron de diferente vía a la del primer tiempo, puesto que el colista remedió sus males con una defensa más cerrada. De esta forma, los de Abadía probaron fortuna con tiros lejanos, como el de Laencina, que hizo volar a Rafa. O como el de Toledo, con la derecha, que se encontró un balón en la frontal tras un rechace de un córner. O incluso con el pase interior, por abajo, que le dio Fran Sota a Tamayo para que éste se presentara en el área, tras zafarse de velocidad de su par, y lanzara al cuerpo de Rafa. O el remate, casi encontrado, de Ledo en una falta lateral que ejecutó Toledo que Rafa repelió cuando el capitán blanquirrojo se encontraba a apenas un metro de la línea de gol.

Mientras tanto, el Noja no había dado señales de que pudiera remontar. Fue Hugo Reguero, en dos acciones consecutivas, en el 74' y en el 75', el que probó a Mandaluniz. Primero con una falta lateral lanzada con potencia y después con el saque de esquina que se fue envenenando. Entonces, a partir de entonces se firmó como una especie de tregua en la que ninguno de los dos volvieron a chutar a portería. Cierto que la SDL lo intentó, pero sus tiros, todos, se marcharon por encima del larguero, desde dos faltas, desde casi la misma posición, que lanzaron Candelas y Laencina, además de un tiro de Tamayo desde la frontal. Por su parte, el Noja centró un par de balones desde los costados, banda izquierda de su ataque, sin mayores consecuencias.

En definitiva, una victoria necesaria porque, al menos hasta el domingo (hasta que el Coruxo juegue su partido en Guijuelo), la SDL (38 puntos) sale del puesto de promoción. Además, la victoria, gestada en el tiempo añadido, del Caudal (34 puntos) ante el Sporting B no permite muchas alegrías, ya que el descenso continúa a 4 puntos. El próximo asalto, el tercero tras la jornada de descanso, será en Tanos, donde le esperará un Tropezón, que ayer empató con el líder Racing y que sólo le saca 2 puntos a los blanquirrojos.