sábado, 30 de mayo de 2015

Remontar para ascender

Varea - Ebro: Municipal, 12.00 (0-1)

Está ahí. Parece asequible, se puede casi tocar con los dedos... pero el ascenso queda a un mundo. Evidentemente, mejor que la temporada pasada, cuando en la ida cedieron en casa, pero la dificultad existe. Remontar no es fácil. El Varea lo asume y ha estado trabajando para ello esta semana. Aunque no sólo estos últimos días, es algo para lo que se ha preparado esta temporada. Su 'paseo' por la Tercera riojana, ahí están los 98 puntos sumados, le han dado la posibilidad de lograr el ascenso ganando una eliminatoria. Enfrente estará el Ebro, que ni muchos menos es un convidado de piedra. Llega al Municipal con la intención de hacer bueno el 1-0 de la ida, de aprovechar la necesidad de los locales para marcar y buscar la sentencia con un gol que podría ser definitivo. Porque no hay que olvidarse del valor de los goles a domicilio.

Ese miedo está ahí, pero los hombres de Nacho Ruiz deben salir al campo conscientes de su potencial, con la confianza suficiente para atreverse, en ataque, a mostrar sus virtudes, esas que le han llevado al liderato, a hartarse a marcar goles y goles en los últimos meses. A este respecto, veremos si Rubén Pérez, su 'pichichi', obra el milagro y está en el campo pese a sus costillas rotas. Un golpe de efecto para los adversarios, sin duda. Pero más allá de la presencia del delantero, la nómina de arlequinados capacitados para llevar a buen puerto a los suyos es grande. Si Pitu y Urko deben dar equilibrio en la medular, la capacidad creativa debe pasar por los pies y la cabeza de Chimbo y Esaúl. Sin olvidar la importancia de la solidez defensiva, tan importante en citas como la actual. Día para crecerse, para estar concentrados, para no volverse locos de primeras en busca del gol -hay tiempo-, para mantener la constancia, para aprovechar las oportunidades y hacerse fuertes en las acciones de estrategia.


Calahorra - Gimnástica Segoviana: La Planilla, 18.00 (0-3)

El resultado de la ida obliga al Calahorra a tirar casi de heroica. El 3-0 exige que todo le salga bien al cuadro local y que la Segoviana tenga un mal día. Si hace siete días, al cuarto de hora el marcador era de 2-0 cabe pensar si el conjunto de Eduardo Arévalo, empujado por la afición y con La Planilla como aliado, será capaz de creer en la remontada. Un gol al comienzo sería el punto de partida para confiar en los riojabajeños. Capacidad para marcar tienen, sólo queda concretar esas ocasiones que lleguen. Para ello será fundamental que se olviden de lo que acontecido en la ida y se centren en la vuelta. Sin ansiedades, conscientes de lo que son, sin presiones. Aunque la meta sea acceder a la siguiente ronda, no encajar es fundamental.

Pero sólo con eso no se está en el bombo del lunes. Hace falta que los hombres determinantes del Calahorra tomen las riendas, aparezcan, se hagan grandes en su campo, demuestren su calidad, su valía, su experiencia para tratar de impulsar al equipo y buscar lo que parece imposible. Cierto que lo vivido en liga poco importa pero que los rojillos hayan ganado 17 de los 19 partidos (2 empates) jugados en La Planilla debe ser un estímulo para intentar la proeza. Al menos, eso, haberlo intentado. Difícil, sí. Mucho. Pero el fútbol es caprichoso y lo que hoy se ve negro, en un momento se ve blanco. El arsenal ofensivo de los calagurritanos tiene una gran oportunidad para reivindicarse: Del Puente, Toledo, Omar, Sota, Iván Garrido o Israel Losa y Herce, desde la segunda línea.


SD Logroñés - Cerceda: Las Gaunas, 18.00 (4-1)

Confianza cero. Bajo esa premisa, el cuadro blanquirrojo debe acabar lo que fabricó durante 90 minutos en O Roxo. El 1-4 de la ida parece que deja con un pie a los riojanos en la siguiente ronda, pero cosas más complicadas se han visto en este deporte. Por eso, el cuadro de Raúl Llona no se puede fiar, no se puede relajar, mejor dicho, no se debe relajar, no debe permitir que su oponente ni siquiera tenga opciones de meterse en la eliminatoria. Si la SDL fue certera y letal en determinados puntuales, fue gracias a su capacidad para no descomponerse. Recibir un gol en el primer minuto y a balón parado, su talón de aquiles, no desconcentró a los blanquirrojos, no los alteró. Al contrario, les hizo crecer. Los goles al filo del descanso y nada más comenzar el segundo tiempo confirmaron que el choque se ponía de cara y luego tuvo puntería para rematar la faena.

Fue demostración de conjunto cuajado, que sabe lo que hace y eso ya invita al optimismo. Ahora quedan 90 minutos largos para cerrar el círculo, para lo que algunos consideran que es un trámite, pensar así sería un error. Hacerse fuertes en defensa debe ser una de las claves durante la primera mitad porque seguro que el Cerceda busca la manera de hacer pensar a la SDL, de complicarle el pase. Seguridad y practicidad defensiva, además de tratar de llevar el control del partido, de jugar con cabeza y criterio para impedir que un rival que debe ir al ataque busque el milagro. La baja por sanción de Alberto Gil es importante, aunque dada la diferencia no debería acusarse. Como ya sucediera en la ida, la aportación de Candelas, Sergio Domínguez, Gallardo, Mario León, Peña, Ledo e incluso Laencina, entre otros, debería ayudar para no estropear el magnífico resultado logrado en tierras gallegas.

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